La ilusión por decorar se acentúa en Navidad. Las comidas, cenas y reuniones familiares comienzan a llenar tu agenda. Alguna de ellas te tocará organizarla a ti. La mesa se convierte en el punto de encuentro y hay que acertar, demostrándoles a tus invitados cómo ellos son lo más importante de estas fechas. ¿Tienes ya alguna idea o estás completamente perdido? En El Corte Inglés lo saben y, por eso, han incluido ideas, accesorios y multitud de opciones para vestir todas las mesas, proponiéndote tres tendencias con las que triunfar.

NAVIDAD TRADICIONAL

La decoración más clásica se ha definido siempre con dos colores: rojo y verde. Es la más entrañable y acogedora de todas. Coronas con frutos rojos combinadas con materiales naturales, como la madera, para poder introducir un pedazo de naturaleza en tu mesa. Sitúala siempre en la parte central y utilízala como atrezzo de tus platos y fuentes. Eso sí, que la altura no impida alcanzar la comida en sí. Velas en rojo de diferentes tamaños que ofrezcan cierta calidez. Como textiles, céntrate en servilletas de algodón con estampados de cuadros y un mantel liso, para no mezclar demasiado. Y la vajilla deja que sea en tonos neutros, para no restarle importancia al conjunto.

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UN JARDÍN MÁGICO

Con el verde y los tonos marrones como base, consigue una mesa sencilla y limpia en la que se respire paz y tranquilidad. Inspírate en el diseño minimalista y nada recargado, combinando el blanco de base (en manteles y vajilla) con el dorado o algún otro color metalizado, como puede ser un plata o un rosa palo nacarado en los accesorios. Copas y vasos con destellos o grandes bolas colocadas en jarrones transparentes o repartidas por la mesa.

Se trata de recrear ese estilo nórdico que tiene a los tonos neutros como base y que, muchas veces, crean sus propios adornos. No tengas miedo a lo artesanal y prueba a darles una vuelta. Por ejemplo, reinventa los accesorios de fieltro del árbol como posavasos y usa las guirnaldas como servilleteros.

Además, para esta tendencia es muy importante la luz. Ha de ser cálida y jugar a reflejarse en cristales y diferentes materiales que ayuden a sacar ese brillo propio de los accesorios utilizados. Puedes conseguirla con velas, introduciendo luces en tarros o con bolas que lleven iluminación incluida.

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UN BOSQUE ENCANTADO

Es otra forma de meter lo natural en la propia mesa, pero de una forma más arriesgada y colorida, con decenas de opciones: puedes combinar el verde oscuro con el magenta y el burdeos; o el marrón chocolate con el verde pistacho y el naranja. Ahora sí, se trata de combinar y recargar. Utiliza diferentes materiales como las plumas, rafias y flores, que se apoyen en texturas aún más sofisticadas, como bolas de terciopelo, para dar volumen a una mesa que es mejor dejar desnuda, sin mantel, pero con una vajilla que tenga personalidad y una cristalería que no sume mucho más color.

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