Todos hemos pisado IKEA alguna vez. Quien diga lo contrario, miente. Y todos nos hemos perdido intentando llegar desde su exposición de muebles permanente hasta la planta de autoservicio. Quien diga que no, también miente. Por eso, la multinacional sueca ha decidido ponérnoslo (un poco) más fácil: tan solo 900 metros cuadrados divididos en dos plantas en pleno centro madrileño. Un espacio temporal que busca dar un giro en la relación IKEA-cliente, centrándose en el diseño y la personalización.

El próximo jueves 25 de mayo, la multinacional inaugura su escaparate más personal en un nuevo concepto de tienda: IKEA TEMPORARY Dormitorios; pues durante los próximos seis meses estará enfocado, íntegramente, al espacio que dedicamos al descanso. Desde muebles hasta casi 300 complementos relacionados con el espacio (quizás) más personal de una casa. Eso es, el dormitorio.

El escaparate de la tienda será el elemento más importante y en el que IKEA ha volcado todos sus esfuerzos. Para esta primera toma de contacto, ha querido contar con el talento de Ricardo Cavolo, un ilustrador español conocido por sus retratos cargados de simbolismo. Él ha sido el encargado de reinterpretar el mundo del sueño para esta nueva propuesta de IKEA.

Es en nuestro dormitorio donde más tiempo soñamos dormidos, un cielo estrellado nocturno aparecerá en la zona inferior; mientras que la parte superior representa el mundo onírico lleno de fuego y luz, creando un limbo casi surrealista, (Ricardo Cavolo).

PERO, ¿QUIÉN ES RICARDO CAVOLO?

Nació en Salamanca hace ya 35 años y se licenció en Bellas Artes. Llegó al mundo de la ilustración por vocación, pues nadie como un maestro para entender lo que esa palabra significa. Dibujaba desde niño y veía cómo su padre trabajaba sin cesar en su estudio de pintura. Pero no solo se quedaría en eso de dibujar. Su trabajo abarca diferentes ámbitos: desde el diseño gráfico hasta la pintura mural, la ilustración editorial o la pirografía, -una técnica de dibujo que utiliza un utensilio específico, el pirograbador-.

Sus ilustraciones son un retrato de las pequeñas historias con encanto que esconde la vida. Y nada mejor que la propia piel de los personajes para hacerlo, porque somos las personas las que sentimos y expresamos. De ahí, que uno de los recursos que más emplea sea recargar la información de un cuadro con los tatuajes de sus protagonistas. Otro, por ejemplo, son las narices y los mofletes rojos. Un recurso que, según Cavolo, busca “aportar vida al dibujo”.

Ilustración de Ricardo Cavolo.

Su estilo está repleto de simbolismo y códigos internos que ahora, con IKEA, reinterpretará eso que todos hacemos cuando nos acostamos: soñar. Porque no solo se trata de dormir bajo las estrellas, eso es solo el principio. Un lienzo en blanco en el que dibujar todo un mundo de deseo. Y lo hará con su estilo personal y único, con su amplia gama de colores y su estética naïf, esa misma que ha heredado de sus primeros trabajos como ilustrador de libros infantiles.

Desde el Aeropuerto de Montreal, hasta el Circo del Sol o las propias oficinas de Google. Cavolo ha sido reclamado por multitud de marcas que buscan darles un toque personal, colorido y brillante a sus espacios. Él es el artista de los ordenadores portátiles del FC Barcelona, de numerosos festivales en México, Reino Unido o Canadá, y de murales para Urban Outfitters o Nike.

Además, ha ilustrado libros como Cocina Indie (2012), Cocina Pop (2013) y uno propio titulado Historia ilustrada de la Música. 100 artistas sin los que no podría vivir (2014), creado íntegramente por Cavolo. Seguro que, gracias a él, no nos importará perdernos esta vez.

Frida Kahlo tatuada según Ricardo Cavolo.