En Occidente es una gran desconocida. Todo lo contrario en Oriente, donde la princesa Deena Al Juhani Abdulaziz (42 años) es todo un icono de estilo y de belleza. Más ahora cuando la esposa del sultán bin Fahad bin Nasser bin Abdulaziz se ha convertido en la nueva editora jefe de la edición de Vogue en Arabia Saudí. Aunque no suele ofrecer declaraciones a los medios de comunicación, ha asegurado que su nueva faceta es un reto muy importante para ella. "Vogue Saudita va a ser muy fuerte. Da miedo y emociona a la vez. Mi vida va a cambiar como editora y tal vez no pueda viajar tanto como antes porque mi nuevo trabajo conlleva una importante responsabilidad, pero será magnífico".

La princesa Deena en la Semana de la Moda de Nueva York en 2016. Getty Images

Pasó su infancia entre Estados Unidos y Oriente Medio, donde conoció a su marido con el que se casó en 1998 y junto al que ha formado una familia. Cuando el bin Fahad bin Nasser la vio por primera vez en un centro comercial, quedó fascinado con su belleza y se dedicó a cortejarla a través de amigos en común. "Al principio mi papá no estaba muy convencido del noviazgo, porque no quería que me convirtiera en una 'esposa trofeo' de esas que permanecen guardadas en su casa. Pero cuando lo conoció mejor, supo que era un hombre que me iba a apoyar en todo", reconoció en una entrevista para el diario The Telegraph.

Durante un evento en 2013. Getty Images

Dicho y hecho porque la pareja, que lleva 18 años de relación, tiene tres hijos en común, que son su pasión, pero Deena compagina su vida como madre y esposa con otra de sus debilidades: la moda, un mundo donde ha sabido hacerse un hueco siendo hoy en día una de las personas más influyentes. Christian Louboutin puso el nombre de la princesa a unos zapatos. Actualmente la sultana cuenta con un negocio propio de ropa, que es referencia en la venta de lujo de manera online. Entre sus clientas se encuentra la mismísima Rania de Jordania (46). "Cuando descubrí el mundo de la moda nunca más miré atrás", explicó durante una entrevista para NY Mag. Esa es la razón por la que vive a caballo entre Nueva York y Dubái, donde tiene fijada su residencia.

Junto a unos amigos en un front row. Getty Images

Sus ojos rasgados, su tez morena y su pelo a lo garçón son las señas de identidad de esta mujer con un estilo lady. Sus diferentes apariciones públicas son aplaudidas allá donde va. Celebrities como Kim Kardashian (36), a la que conoció durante un desfile, es una de las que ha caído rendida a sus pies. Además es una de esas princesas tan modernas que tiene una actividad frenética en las redes sociales, donde acumula más de 68.000 seguidores. Eso sí, n ellas no suela mostrar su parcela más privada sino los eventos a los que acude dejando ver sus gustos y aficiones. Uno de sus últimas publicaciones es un vídeo realizado durante la presentación de la última colección Otoño/Invierno de Louis Vuitton en París.

La sultana con dos amigas en Nueva York. Getty Images

El padre de Deena, un economista que estudió en Londres, siempre se preocupó porque sus hijos tuvieran contacto con otras culturas. De aquí que la princesa haya sabido eliminar las diferencias, convirtiéndose en un puente entre Oriente y Occidente. De momento, como editora de Vogue en Arabia Saudí, ha conseguido que la súpermodelo, Gigi Hadid (21), ocupe la portada de la revista.

Portada de la revista Vogue en Arabia Saudí.

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