Los casi 30.000 kilómetros que han recorrido Gabriela Palatchi (25) y su marido Ediz Elhadef (39) a lo largo de los últimos 30 días -con sus 30 noches- han tocado ya a su fin. Durante todo este tiempo los recién casados han viajado por medio mundo y han visitado algunos de los rincones más recónditos del planeta. Australia, Nueva Zelanda y Chile han sido los destinos elegidos por la heredera de Pronovias para disfrutar de una luna de miel de ensueño que tiene, como colofón, la ciudad de Valencia.
Así lo ha anunciado la propia Palatchi, que informaba a sus amigos más cercanos de su vuelta al trabajo, prevista para esta misma semana en la ciudad del Turia. Después, la pareja regresará a Estambul, donde residen desde hace dos años.
En su álbum de fotos quedarán para el recuerdo los exóticos destinos de su luna de miel: Sidney (Australia), el columpio más grande del mundo (Nueva Zelanda), la isla de Pascua (Chile), el desierto de Atacama y la Patagonia chilena.
Aquí han podido disfrutar del campo de geisers de Tatio, de las torres del Paine y de la gran cantidad de lagos que pueblan la zona, como el Grey, lugar del que los novios han compartido multitud de fotografías.
Una boda de cuento de hadas
Hace un mes la hija de Alberto Palatchi (55) daba el sí, quiero al empresario turco Ediz Elhadef en un enlace de ensueño celebrado en la casa familiar de la Cerdanya.
Momento en el que Gabriela Palatchi se lanza a bailar de la mano de su marido, y del ramo.
Hasta allí se desplazaron ilustres invitados -algunos pertenecientes a la alta sociedad catalana- que pudieron ver in situ el secreto mejor guardado de la novia: un vestido estilo sirena con los hombres al descubierto confeccionado por el director creativo de Pronovias, Hervé Moreau.
Los novios, el día de su boda.
El lujo fue el protagonista de un acontecimiento que duró tres días. El pistoletazo de salida se daba el viernes con una fiesta flamenca en el Puerto de Barcelona. La ceremonia en sí tuvo lugar el sábado y para ello se acondicionó el espectacular jardín con estanque de la casa familiar. Carpas, flores y performances en directo pusieron la guinda a un pastel que se retransmitió con todo detalle en las redes sociales. No en vano muchas de las amigas de la novia son blogueras e it girls acostumbradas a compartir su día a día con sus seguidores.