Las monarquías europeas no están atravesando su mejor momento en cuanto a problemas de salud se refiere. En concreto, dos son las que están acaparando toda la atención por el delicado estado de algunos de sus miembros más importantes: la Casa Real británica y la noruega

En el país nórdico, el rey Harald V (87 años) ha protagonizado en las últimas semanas numerosos titulares por su hospitalización durante un viaje de ocio a Malasia y su reciente implantación de un marcapasos. Mientras, en Londres, el rey Carlos III (75) está afrontando un tratamiento contra el cáncer tras su diagnóstico. 

Dos formas completamente diferentes de hacer frente a una enfermedad del monarca del país y que están afectando directamente a su reputación institucional. Mientras que en Noruega conocen, casi al minuto, cómo se encuentra su rey, en Reino Unido se desconoce qué tipo de cáncer padece o a que tratamiento está sometiéndose

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La familia real noruega en una imagen de archivo de 2022. Gtres

En un principio, el ingreso de Harald de Noruega fue muy criticado y cuestionado por sus seguidores. Nadie entendía como una persona de su edad y con su historial médico podía haber viajado hasta el país asiático. Pocos días después, fue su hijo, el príncipe Haakon (50) y heredero al trono, quien salió a dar explicaciones públicas sobre lo sucedido. En una breve rueda de prensa, comunicó que había sido una decisión que su padre había tomado con el consentimiento de su médico y que tratarían de manera interna el cómo dieron la noticia. 

Precisamente, lo que se cuestionaban era si habían sido demasiado transparentes a la hora de comunicar las noticias. Desde entonces, prácticamente a diario la Casa Real comparte un comunicado sobre el estado de salud de su representante real

Mientras que en Noruega se plantean si tienen que ser menos claros con las informaciones, en Reino Unido continúan con un hermetismo nunca antes visto, motivo por el que se están enfrentando a una crisis institucional a nivel internacional

La familia real británica en una imagen de archivo de 2022. Gtres

Es cierto que la Casa Real británica anunció desde el primer momento en el que se conoció el diagnóstico, que el monarca padecía cáncer. De ese comunicado ha pasado ya más de un mes y continúa siendo una incógnita cómo se encuentra y dónde está localizado. Muchos medios han apuntado a que podría ser de páncreas, sin embargo, no está confirmado por ninguna fuente oficial. 

Otro de los graves problemas a los que se están enfrentando los Windsor, y que les ha convertido en protagonistas esta última semana, es la desaparición de Kate Middleton (42). Nada se ha vuelto a saber de ella desde que fue intervenida quirúrgicamente el 16 de enero. Ni se conocen los motivos de la operación ni por qué están actuando de una manera tan hermética con su caso

La manipulación de la conocida fotografía junto a sus hijos ha avivado los rumores del estado de salud de la futura reina del país. Precisamente, su caso tiene que ver mucho con la monarquía noruega.

Mette Marit, Haakon de Noruega, Kate Middleton y Guillermo de Inglaterra. Gtres

En el país nórdico siguen haciendo frente al problema de salud que atraviesa Mette Marit (50). La que comenzó su relación con el heredero al trono como la princesa más salvaje y rebelde, ahora es una de las personas más queridas. En 2018, le diagnosticaron fibrosis quística, motivo por el que se ha tenido que ausentar durante meses de la agenda real oficial. 

La princesa nunca ha ocultado su historial clínico y, de hecho, ha visibilizado su enfermedad abiertamente para que todo el mundo conozca su situación y la que viven otros pacientes como ella. Precisamente, esta transparencia ha hecho que el pueblo noruego apoye incondicionalmente a Mette Marit y en los momentos en los que se ausente, pueda notar ese cariño de los suyos

Lo mismo sucedió, en un principio, con Kate Middleton. Todo el mundo se volcó en mandarle mensajes de ánimo, sin saber siquiera qué es lo que le ocurría. Pero dos meses después de este momento, el apoyo se ha convertido en rumores, teorías y falta de credibilidad. ¿Qué es lo que le sucede?

Debido a los problemas de salud que están atravesando los miembros más importantes de cada monarquía, son los herederos al trono los que han tenido que dar un paso al frente y hacerse cargo de los actos institucionales. Mientras que Haakon lleva años supliendo y actuando como monarca por los problemas de salud de su padre, Guillermo no ha estado todo presente todo lo que se esperaba de él. En parte, esta ausencia viene acompañada del problema de salud que atraviesa su mujer.