Desde hace más de una semana, nadie pone en duda que el nombre de Ainhoa Armentia (43 años) es el más comentado, repetido y proclamado en todos los medios de comunicación de España y medio mundo. Unas fotografías de la mano de Iñaki Urdangarin (54) la convirtieron en la mujer más buscada del momento.

Todos querían hablar con ella, conocer de ella y su entorno. Armentia, natural de Vitoria, vio cómo aquel aciago y difícil 19 de enero de 2022, cuando salió la portada de marras, su vida dio un viraje de 180 grados para no volver a ser la misma. Se le acabó el anonimato y la presión mediática se le echó encima como un manto pesado

Hasta la fecha, sólo se tiene una imagen repetida diariamente de Ainhoa: entrando y saliendo del despacho de asesoría jurídica donde trabaja y conoció a Urdangarin hace unos meses. Seria, sonriente o dando los buenos días a la prensa, Armentia tan solo ha roto su silencio en estos frenéticos días para pedir respeto por su familia. 

Ainhoa Armentia Acedo llegando al despacho de abogados donde trabaja en Vitoria. Gtres

Hace unas horas, EL ESPAÑOL pudo conocer que, en pos de conseguir esa súplica a los medios, Ainhoa dejó de frecuentar el que todavía es su casa conyugal -donde vive con su todavía marido y sus dos hijos-, para "vivir con su padre" y así amainar el asedio mediático a los suyos. No lo ha conseguido del todo, pues la prensa y la televisión han podido hablar con sus vecinos y hasta han inmortalizado a su madre, Antonia

En medio de este tenso ambiente, este periódico ha podido conocer que la que está llamada a ser la nueva ilusión sentimental de Iñaki Urdangarin cotiza al alza en cuanto a su popularidad. El interés sobre su persona es incuestionable y ya ha recibido "llamadas" de medios de comunicación y también de algunos representantes punteros en el sector para prestarle sus servicios de cara a una proyección pública, como avanzó Es la mañana de Federico y amplía este medio. 

De momento, la amiga especial de Urdangarin ha dicho "no"; no le interesa dar ese paso tan importante en su vida. Tampoco es cierto que su intención sea dar el salto a la televisión y los realities, como se ha dicho. "Existen conversaciones y ella ha escuchado" lo que se le ha propuesto, pero nada más, se aclara. Lo que sí ha contratado Ainhoa Armentia son los servicios de un abogado, que la está guiando en estos convulsos días. 

Se insiste a este periódico en que Ainhoa estaría midiendo muy mucho sus movimientos. Por delante, le esperan unos meses complicados en los que tendrá que finiquitar su compromiso matrimonial, y ésa es la razón principal por la que no habrá, de momento, imágenes de ella e Iñaki. "Quiere hacer las cosas bien, por eso está pidiendo asesoramiento legal", para intentar frenar la avalancha de información que se continúa vertiendo en televisión y medios "sobre su intimidad y honor y los de su familia". 

Ainhoa Armentia a la salida de su trabajo en Vitoria. Gtres

El miércoles 19 de enero de 2022 siempre será un día marcado en el calendario personal de la familia de Urdangarin y de Borbón. La revista Lecturas publicaba unas imágenes donde se veía al exduque de Palma paseando por una playa de Hossegor junto a una mujer a la que pocas horas después se podía identificar con nombre y apellidos.

Ella era Ainhoa Armentia, una compañera de trabajo en el bufete Imaz & Asesores, donde Iñaki Urdangarin empezó a trabajar en el mes de marzo tras su paso por la cárcel de Brieva y de Nanclares de la Oca. Armentia era una mujer casada y madre de dos hijos. Según se ha podido saber, Ainhoa es una gran amante del pádel, del running y ha participado en varias carreras en su Vitoria natal, como la Carrera de la Mujer.

Iñaki y su reunión familiar

El pasado viernes 21 de enero al mediodía, Iñaki Urdangarin abandonó la asesoría en la que trabaja y donde conoció a Ainhoa, la mujer con la que fue captado en actitud cariñosa. Tal y como informa Lecturas en exclusiva, entonces, el que fuera jugador de balonmano emprendía un viaje de más de mil kilómetros en coche para reunirse en Ginebra con la infanta Cristina de Borbón (56). 

El encuentro tuvo lugar en la casa en la que reside de la exduquesa de Palma junto a su hija menor, Irene (16). A la reunión también asistió su hijo Miguel (19), el más desconocido de los varones y quien estudia Ciencias del Mar en Londres. 

Urdangarin y su todavía esposa, Cristina, en una fotografía tomada en diciembre de 2019. Gtres

En Ginebra estuvieron hasta el domingo, cuando padre e hijo se despidieron con un emotivo abrazo en el aeropuerto de la ciudad suiza, que este miércoles 26 de enero protagoniza la portada de la mencionada cabecera rosa. 

10 horas más tarde, Iñaki Urdangarin llegó a Vitoria, donde reside con su madre, Claire Liebaert, desde que obtuvo el tercer grado penitenciario, régimen de semilibertad que lo habría obligado a pedir un permiso judicial para abandonar España. 

Aunque el todavía matrimonio decidió reunirse con sus hijos este fin de semana, antes de que saliera a la luz el escueto comunicado que anunciaba su separación, la infanta Cristina conoce la nueva relación de Iñaki Urdangarin desde hace meses.

Tal y como pudo saber EL ESPAÑOL, la hermana del rey Felipe "lo sabe desde después de verano. De hecho, el mes de septiembre fue lo que ella misma ha llamado el peor momento de su vida". Según explicó una de las mejores amigas de la exduquesa de Palma a este periódico, "a la infanta se lo contó su propio marido. Fue él quien se lo contó a ella y a sus cuatro hijos".

[Más información: La reunión secreta de Iñaki Urdangarin con la infanta Cristina y sus hijos antes de anunciar su separación]

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