Cada día es más difícil llevar accesorios originales a la moda. Ya os dimos las pistas para hacer collares de trapillos, ahora os enseñaremos a conseguir la decoración de vuestras orejas.

Cómo hacer pendientes originales

Básicamente, un pendiente es un trocito de metal que puede usarse para atravesar nuestra oreja y que puede llevar, o no, dos elementos más: un cierre trasero para evitar que se nos caiga y algún tipo de adorno, colgante o no, en la parte delantera. Ese trocito de metal es la parte esencial del pendiente. Puede ser de tres tipos: 

  • Alambre curvado (con o sin cierre trasero) con una anilla para colgar elementos de bisutería (cuentas, piezas de metal…)
  • Alambre recto (normalmente con un cierre trasero) con una base plana en la parte que va a quedar delante de la oreja, sobre la que se pueden pegar distintos elementos.
  • Aro metálico

Los tres tipos de "bases" para pendientes pueden encontrarse fácilmente en tiendas que vendan piezas de bisutería. Una vez decidido el tipo de pendiente, solo hay que pensar en qué vais a añadir: ¿objetos reciclados?, ¿objetos artesanales?, las opciones son múltiples. A continuación, os presentamos unas cuantas ideas para tus piezas únicas:

Abalorios, la opción más simple

Al igual que os indicamos en cómo hacer pulseras de hilo, os recomendamos abalorios que resultan baratos, accesibles y muy versátiles, y se puede trabajar con ellos de manera rápida y limpia, con la única ayuda de una aguja y un carrete de hilo de pescar: basta con enhebrar cada uno de los abalorios (que suelen venir agujereados) y unir el extremo del hilo al gancho de metal para tener unos pendientes distintos a los de todos los demás. 

Luego, podemos ir complicando los diseños: colgar varias tiras de abalorios del mismo gancho, unir las cuentas de manera que se creen formas y diseños geométricos, crear figuras sencillas, como flores, etc. También se venden accesorios para pendientes con formas, que basta unir al gancho, pero ese tipo de pendientes dan resultados mucho menos originales y no resultan tan creativos. 

Hacer pendientes originales

Quizás haya algunos objetos que estamos acostumbrados a ver colgando de las orejas de la gente, como pequeñas llaves, tornillos o cierres de cremallera, pero estoy segura de que ninguna de vosotras habrá visto nunca unos pendientes hechos con fusibles, lápices de colores u ositos de gominola, y es que, si lo que buscáis es algo diferente, cualquier cosa que se encuentre en vuestros cajones puede ser de ayuda.

Una cremallera rota puede pegarse a una base de pendiente, o colgarse de un gancho, y lo mismo puede hacerse con casi cualquier objeto que podáis encontrar. No deis nunca ningún objeto pequeño por perdido, ya que una simple chapa de una botella de refresco o de cerveza puede convertirse en un par de pendientes únicos y con carácter. Si se le puede hacer un agujerito para pasar un arito o un hilo, servirá.

Para acompañar a la explicación te compartimos un video para que tus elaboraciones salgan perfectas:

Pendientes de chapas

Pendientes con globos de agua

Si encontráis por casa unos cuantos globos de agua de distintos colores podéis crear con ellos unos pendientes de lo más original. Basta con poner dos o tres uno encima del otro, estirados sobre una mesa, y enrollarlos para crear un cilindro con una espiral de colores en su lateral. Una vez hecho eso, se atraviesa la espiral con un alambre y se une con el gancho, creando así un bonito pendiente, muy colorido, y de un material duradero y poco pesado. 

Pendientes con cápsulas de café

Quién tenga una cafetera tipo Nespresso está de enhorabuena, ya que con las cápsulas usadas se pueden crear pendientes de lo más originales con muy poco esfuerzo, siguiendo cualquiera de los tutoriales que están disponibles en internet. La ventaja de las cápsulas de café usadas es que son muy maleables y te permitirán ser muy creativa, siempre con resultados espectaculares. 

La opción más básica es simplemente aplastar la cápsula y colgarla de un gancho o pegarla a una base para crear un pendiente de botón, pero a partir de ahí las posibilidades son infinitas: darles formas, juntar varias para crear esferas, unir varias para un pendiente colgante grande…, todo lo que te permita tu imaginación.

Para acompañar a la explicación te compartimos un video para que tus elaboraciones salgan perfectas:

Pendientes con cápsulas de café

Accesorios para pendientes únicos, artesanales

Y para aquellos que busquéis la exclusividad, siempre queda la artesanía pura, que hoy está al alcance de todo el mundo gracias a materiales como la arcilla polimérica, que permite crear todo tipo de objetos y que, una vez cocida, queda dura y tiene una gran resistencia al desgaste. 

El fimo tiene la ventaja de no necesitar ser pintado, ya que se vende en múltiples tonalidades, y de poder cocerse perfectamente en cualquier horno doméstico, ya que no requiere de temperaturas excesivamente elevadas para adquirir dureza. Por otra parte, y ya para acabar, si lo vuestro es el dibujo una gran opción es usar pequeños trozos de madera sobre el que podéis dibujar o pintar lo que queráis.

En muchas tiendas de abalorios venden maderas de distintas formas que pueden ser agujereadas y sobre las que se pueden aplicar distintas técnicas de dibujo, pintura o grabado. E, incluso, si tenéis el pulso firme, podéis probar con el pirograbado, que consiste en dibujar sobre la madera con un "bolígrafo" que aplica calor y quema la superficie. Los pirograbadores más baratos cuestan unos 10 o 12 euros, así que puedes empezar a usarlos por muy poco.