Una quemadura suele ser uno de los accidentes domésticos más habituales en cualquier hogar. En otro artículo, ya vimos algunos trucos para curar las ampollas y eliminar su dolor, ahora veremos cómo curar una quemadura con remedios caseros.

Tipos de quemadura

Existen dos clasificaciones sencillas que permiten determinar el tipo de quemadura y, a grandes rasgos, la gravedad de la lesión, y el mejor tratamiento para la quemadura.

Según el agente físico que las produce pueden ser las siguientes:

  • Quemaduras térmicas: son las más frecuentes, y se deben a accidentes domésticos como el calor seco (por fuego) o el calor húmedo (por agua hirviendo o por aceite caliente).
  • Quemaduras eléctricas, producidas por algún electrodoméstico encendido.
  • Quemaduras químicas, por productos ácidos.

Según la profundidad y la gravedad de la quemadura, su clasificación sería la siguiente:

  • De primer grado: limitada a la capa más superficial de la piel (epidermis).
  • De segundo grado: se lesionan epidermis y dermis.
  • De tercer grado: se destruyen tejidos de epidermis, dermis e hipodermis, los más profundos. Son las más graves.

Qué hacer si sufrimos una quemadura

Una quemadura será grave si el edema es abundante, tiene mucha inflamación y nos sale una ampolla que es grande. A veces, el dolor no es un indicativo fiable de la gravedad de la quemadura, puesto que las quemaduras mas graves son las que menos duelen. Por esta razón, es necesario acudir cuanto antes a un centro sanitario y no aplicar remedios caseros en casa.

Remedios caseros para curar una quemadura en casa

Si vemos que la quemadura es leve porque la hinchazón no es muy grande, y se ha tratado de un accidente casero sin mayor importancia, podemos buscar un tratamiento para la quemadura en casa. 

En primer lugar, y si vemos que la piel está íntegra y no se ha resquebrajado, lo primero que debemos hacer es lavarla con agua fría (no con hielo) durante al menos unos 5 minutos. Se pueden utilizar compresas mojadas de agua fría, ya que cualquier tipo de enfriamiento ayuda a aliviar el dolor y disminuir el daño a la piel y los tejidos afectados. Una vez enjuagada bien la piel, la secaremos con cuidado, con una gasa limpia, debiendo evitar la exposición al sol, e hidratando la piel con mucha frecuencia para que ésta pueda recuperarse poco a poco de la quemadura.

Podemos aplicarle pasta de dientes para aliviar el dolor y ayudar a que la quemadura vaya cicatrizando, o bien aceite de oliva, que son los ingredientes más habituales para curar quemaduras leves. Si tenemos algún tipo de pomada de farmacia que sea cicatrizante y que ayude a hidratar la piel y a aliviar el dolor, debemos utilizarla con una frecuencia de dos o tres veces al día.

Las quemaduras de carácter leve, que son aquellas que podemos curar en casa sin ningún tipo de complicación, tardarán unos 3 ó 4 días en cicatrizar y no dejan ninguna cicatriz. Tratándolas con pasta de dientes, aceite o pomada, y cubriendo bien la zona durante un espacio de unos cinco días, notaremos que la piel que está resquebrajada se vaya cayendo para dar paso a una renovación de la dermis. Durante estos días, taparemos la quemadura con una gasa seca, y no dejaremos que le dé el sol a esa parte de la piel. 

Si está cicatrizando, la piel quemada se irá cayendo para dejar paso a la nueva epidermis. Debemos dejar la zona afectada al aire, y mantenerla bien hidratada con cremas hidratantes o con aceites, para que la piel vaya creciendo hidratada y se elimine la sequedad de esta zona, que persistirá durante unos días, a medida de que la piel seca vaya cayéndose.

Además, con los remedios caseros, la piel comenzará a cicatrizar, y el dolor agudo del principio cederá. En caso de que notemos que la piel no cicatriza y que el dolor continúa siendo persistente, debemos acudir inmediatamente a un centro médico.

Qué hacer si no podemos curar una quemadura por ser grave

Para quemaduras que consideremos que son más graves porque la parte afectada es más grande y empiezan a salir ampollas, debemos limpiar bien la zona, manteniendo la parte afectada bajo un chorro de agua fría durante, al menos, 15 minutos,secarla bien con un paño o una gasa limpia, y acudir inmediatamente a nuestro centro médico.

Durante los días de tratamiento que prescriba el médico, no se deberá mojar el vendaje, para permitir las condiciones óptimas de curación, durante al menos un par de días, y siempre que lo hagamos en casa, vendar la zona afectada inmediatamente para impedir la entrada de bacterias, o que a la quemadura pueda darle el sol.

Una vez que la quemadura haya cicatrizado, y en todos los casos, tanto en los leves como en los más graves, deberemos mantener una hidratación abundante de la zona, con aceite de oliva, una buena crema hidratante más densa, y también algún tipo de cremas solares, para evitar que nos salgan marcas en la piel. Hay algunos productos específicos como los geles de silicona o los aceites y cremas a base de rosa mosqueta que funcionan muy bien y que ayudan a acelerar el proceso de curación de las quemaduras y de maduración de las cicatrices.