La consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, ha anunciado esta mañana que "podemos estar acercándonos poco a poco al pico y a la meseta de la pandemia del coronavirus", en vista de la progresión de datos observados durante los últimos días. No obstante, la consejera ha querido subrayar que "es un dato de prudencia, ya que el número de contagios se ralentiza solo por la cuarentena social, es absolutamente fundamental que sigamos haciéndola", ha insistido.

Por primera vez el balance de ingresos y altas es negativo, siendo la cifra de las últimas horas de -6 pacientes, es decir, fueron más las altas que los ingresos, un dato muy positivo que invita a la esperanza. Así, las altas hospitalarias alcanzan en Castilla y León las 2.021, 262 desde ayer.

Castilla y León ha sumado 520 nuevos casos confirmados de personas infectadas por coronavirus por lo que la cifra total asciende a 7.875. Han fallecido en las últimas horas otras 63 personas, lo que eleva la cifra de muertos por COVID-19 a 786. 

Verónica Casado ha explicado, además, que la Consejería está en contacto permanente con el Insituto de Medicina Legal y Forense, para conocer en todo momento cuál es la totalidad de fallecidos por coronavirus y "tener los mejores datos".



Entre los profesionales sanitarios, hay actualmente 2.102 profesionales aislados, 1.335 de los cuales han dado positivo por COVID-19. Se han realizado un total de 22.283 pruebas, 1.800 de ellas en las útlimas horas.

El nivel de ocupación hospitalaria se mantiene similar a los últimos días, y en las UCIs extendidas es del 80%.