La Asociación de Hostelería de Valladolid asegura que las nuevas restricciones que entrarán en vigor mañana hacen que la situación sea ya "insostenible" y denuncia la actitud "pasota" de la Junta con el sector.

A través de un comunicado remitido a Europa Press, denuncian la actitud "pasota" que el Ejecutivo Regional está teniendo con el sector y ,en concreto con el vallisoletano, comienza a rayar lo "indignante" al no tener en cuenta ninguna propuesta ni posibles soluciones.

"Además de volver a reclamar un tiempo suficiente para gestionar los posibles cierres, se une el hecho de que las medidas restrictivas que se toman, las tengamos que conocer por la prensa. Se escapa a nuestro sentido común, que un sector tan vertebrador de la economía nacional, tenga en toda España 17 formas distintas de hacer las cosas, y que sorpresivamente, una y otra vez, lo refrenden la práctica totalidad de las Consejerías de Sanidad en las reuniones semanales del Consejo Interterritorial", señala el comunicado.

La asociación recuerda que el pasado 13 de enero propuso al vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, la vacunación de sectores que estuvieran expuestos de una forma especial al contagio, incluyendo en ellos a la hostelería, como posible medida preventiva para evitar los cierres. "Después de tres meses la respuesta de Francisco Igea ha sido... ninguna", insiste.

En este sentido, advierten de que no se puede mantener un negocio con el cerrado un mes, abriendo diez días y cerrar otros 15. "No son formas. Como tampoco lo son los cambios en los criterios para aplicar estas medidas restrictivas. Lamentablemente sólo nos demuestra una auténtica incapacidad de gestión agravada por centrarse sólo y exclusivamente en la hostelería", apunta.

Además, la Asociación asegura no entender como ahora el Consejo Interterritorial de Salud recomienda cerrar los interiores de los establecimientos de Hostelería cuando se superen los 150 casos de incidencia acumulada por 100.000 habitantes a 14 días, basándose en datos que, a su juicio, cada vez son más contradictorios, y que en el caso de ser ciertos nunca demuestran que la hostelería sea la culpable de ese ritmo de incidencia.

"La recomendación de cerrar los interiores de la Hostelería cuando se llegue a los 150 casos de incidencia por parte del Consejo de Salud, a instancias de la propuesta de la Ministra de Sanidad, sólo la entendemos como una medida claramente política para enfrentarse a las políticas sanitarias de Madrid, que está demostrando son las mejores para equilibrar el aspecto sanitario con el económico. Volvemos a poner el foco en la actuación del gobierno de la comunidad de Madrid. Con la hostelería abierta ha mantenido niveles similares a los de Comunidades cerradas en su totalidad, o incluso inferiores, y ahora con la comunidad cerrada está comenzando a dispararse el número de contagios", explican.

El sector hostelero, ya no solo el de Valladolid, sino el regional y nacional, rechaza que sus negocios provoquen un incremento de los contagios. "La hostelería, si algo genera, es control, y es la forma más segura de tener controlada la expansión del virus. Esta decisión del Gobierno de Castilla y León vuelve a ser un torpedo en la línea de flotación del sector, pues ya en muchos hosteleros su capacidad de resistencia económica es prácticamente nula, sobre todo para aquellos establecimientos que carecen de terraza. Su posibilidad de subsistencia se va a agotar. Es la crónica de una muerte anunciada", lamenta.

De ahí que señalen que, desde octubre, con la Comunidad cerrada se llevan adoptando medidas drásticas, "una semana si y otra también", sin bajar "un ápice" los contagios.

"El sector está harto, muy harto, de la escasa capacidad de gestión para llegar al equilibrio sanitario y económico. Eso sin hablar de los problemas para el cobro de los ERTES, o de la escasez de ayudas directas, que llegan tarde y con cuenta gotas. Con otro problema añadido, y nos volvemos a reiterar en lo mismo, no se puede a este sector decirle un día antes si vas a cerrar o no, tenemos que hacer compras, encargar nuestros suministros, en muchos casos perecederos, nombrar turnos de trabajo o cuadrar plantillas. Esto es ya un auténtico despropósito", ahonda.

De ahí que piden a la consejera de Sanidad, Verónica Casado, que igual que "bombardea" con datos de contagios y de incidencia acumulada, o de ocupaciones de hospitales, les dijera los estudios realizados para constatar que esas situaciones son producidas por la hostelería.

"Esta misma petición ha sido realizada por la Patronal nacional del sector al Ministerio de Sanidad y en ambos casos no ha existido respuesta. Tirando de ironía, solo nos queda decir, continúen así que lo están haciendo muy bien. La situación es insostenible", concluye.