NoticiasCyL Valladolid vuelve a charlar con el virólogo vallisoletano, de Villalón de Campos, Mariano Esteban Rodríguez, más de tres meses después, para saber cómo va la vacuna que él y su equipo del Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC) quieren poner en funcionamiento en otoño de 2021, como nos confesó en septiembre.

La vacuna en la que trabajan Esteban y su equipo consiste en una versión atenuada de la usada para erradicar la viruela pero busca incorporar proteínas del nuevo SARS-CoV-2 para encontrar la mayor inmunidad posible en nuestro organismo y lleva el nombre de MVA-COVID-19 (S).

Charlamos con el virólogo vallisoletano sobre la hoja de ruta de su vacuna, financiación, la aparición del resto de vacunas a lo largo y ancho de todo el mundo y sobre muchas cosas más en la siguiente entrevista.

Pregunta. ¿Cómo se encuentra su vacuna? ¿En qué fase?



Nuestra vacuna se encuentra en fase de producción industrial



Respuesta. Nuestra vacuna se encuentra en fase de producción industrial. La está llevando a cabo  una empresa gallega que se llama CZ Vaccines/Biofabri. Han hecho ya el lote técnico y la estamos caracterizando, desde el punto de vista funcional. A su vez se está preparando también el lote clínico. También estamos elaborando el dossier clínico para la Agencia Española del Medicamento y para la Agencia Europea del Medicamento. Se ha realizado un primer borrador y se está completando.

¿Cuál es la hoja de ruta de su vacuna?



R. El objetivo es hacer Fase 1 y Fase 2, las fases clínicas, en el primer trimestre de 2021 y continuar a lo largo de ese año. Para la primera necesitamos 100 voluntarios y para la segunda unos 500. De esos estudios  analizaríamos la seguridad, seguida de la capacidad inmunogénica, producción de anticuerpos neutralizantes y linfocitos T, con capacidad de reconocer y destruir células infectadas. Estamos siguiendo también el protocolo para definir la empresa de gestión de los ensayos clínicos y hospitales participantes.

P. Cuando hablábamos en septiembre apuntaba que podrían tener su vacuna preparada para otoño de 2021. ¿Sigue manteniéndolo?



Nuestro deseo es que en otoño de 2021 tengamos los datos clínicos necesarios para que nuestra vacuna se pueda administrar



R. Sí. Nuestro deseo es que en otoño de 2021 tengamos los datos clínicos necesarios para que nuestra vacuna se pueda administrar con seguridad en la población. Para ellos necesitamos completar un Fase 3 con unos 20.000-30.000 voluntarios y ahí tenemos que considerar mas centros clínicos participantes y, lógicamente, tener la financiación que sería necesaria.

P. Recuérdenos en qué consistía su vacuna.



R. Se trata de una variante (MVA) de la vacuna que se utilizó para erradicar la viruela. Es un virus ADN muy atenuado de la familia de los Poxvirus, cuya característica es que produce en el organismo respuestas inmunológicas muy amplias y duraderas, y además es muy estable y puede administrarse en cualquier lugar del mundo. Hemos insertado, en su ADN una copia del gen que codifica y produce la proteína S (espícula), que se encuentra en la membrana externa del coronavirus SARS-CoV-2. Esta vacuna actúa como vehículo transportador y una vez que se inocula por vía intramuscular penetra en las células y va a producir la proteína S del coronavirus en cantidad suficiente para activar el sistema inmunológico, es decir, a las células B productoras de anticuerpos, y  los linfocitos T capaces de reconocer y destruir la célula infectada. Esa es la esencia de nuestra vacuna. Esperamos que la inmunidad que produzca sea más prolongada y más amplia que la de otras vacunas basadas en el ARN mensajero.

P. ¿Cómo ve los avances tan rápidos de vacunas ARNm como la de Pzifer o la de Moderna? Estas cuentan, claro está, con una financiación de miles de millones por parte de los distintos gobiernos.



R. Como científico que ha venido trabajando durante muchos años con ácidos nucleicos, y sigo haciéndolo, la utilización del ARN mensajero y su aplicación como candidato vacunal, es espectacular. Esa capacidad para inducir una respuesta inmunitaria provocada por una molécula ARNm tan inestable está transformando la aplicabilidad de este tipo de moléculas en la clínica, no solamente frente a virus si no también contra el cáncer. Se ha conseguido acoplarla a unas estructuras, nanopartículas lipídicas, como si fueran gotas de grasa que aportan gran estabilidad y capacidad para penetrar en las células, producir la proteína S y activar la respuesta inmunológica.

Lo realmente interesante desde el punto de vista científico, es que este es un proceso que ocurre de forma distinta a como el ARNm se produce y procesa en las células. Es en los cromosomas que están en el núcleo, donde se produce el ARNm celular, que se exporta a través de un proceso complejo al citoplasma donde encuentra a los ribosomas y comienza la célula a producir las proteínas que son su sustento metabólico. Sin embargo, en el caso de la vacuna de ARNm, le inyectamos a la célula el ARNm desde fuera, cosa bastante extraña. Lo importante es que hace lo que debe, produce una proteína S,  y activa el sistema inmune. El resultado es muy positivo, ahora bien, lo que no sabemos es cuánto tiempo va a durar la inmunidad y qué grado de eficacia va a tener en el tiempo.

La ventaja de estas vacunas de ARNm es que son fáciles de producir, aunque requieren condiciones para el almacenamiento de temperaturas en frio mas exigentes que otras vacunas, como la de Pfizer con temperaturas de -80ºC. En cuanto a los efectos adversos de estas vacunas los iremos viendo con el tiempo, pero los ensayos clínicos han demostrado seguridad de estas vacunas. Los casos recientes en el Reino Unido de reacción alérgica severa en dos individuos con serios antecedentes alérgicos, nos indica que se está llevando a cabo un seguimiento a fondo por las autoridades reguladoras que lo consideran como grupos de riesgo, pero mas dentro de la normalidad cuando las vacunas se usan en un tamaño grande de población.

También es muy importante reseñar que estos proyectos de vacunas mRNA y de otras vacunas cuentan con una financiación enorme de la que carecemos en nuestro país.

P. Esa financiación, en caso de su vacuna, es escasa, como apunta. ¿En qué fases clínicas de la vacuna lo van a notar más?



R. Lo vamos a notar, sobre todo, en la Fase 3, la más avanzada. En cuanto a las Fases clínicas 1 y 2 podemos llevarlas a cabo con los recursos que tenemos de proyectos, institucionales y donaciones, pero para llevar a cabo la Fase 3, con miles de personas, necesitamos más apoyos económicos.

P. ¿Llegará ese apoyo?



Es muy importante que España tenga también su propia vacuna



R. Vamos a ver. En España la gente es generosa. Hay que confiar. Es muy importante que España tenga también su propia vacuna porque eso demuestra la capacidad tecnológica y científica del país. Es una marca, una carta de presentación. Para que a nivel global estemos igual de avanzados que los demás países.

P. ¿Cuánto de importante sería conseguir esa vacuna propia?



R. Ello demuestra el potencial científico y tecnológico de España. Cosa que han hecho  otros países como Bélgica, los nórdicos, que han apostado por la ciencia como elemento de desarrollo competitivo y están avanzando de forma espectacular. Tenemos que confiar en la ciencia porque es la que va a dar salida a nuestro país de cara al futuro. Todo gira en torno al conocimiento y a la capacidad científica y tecnológica de un país. Tenemos que transformar el conocimiento en bienes y servicios para la sociedad.

P. ¿Está más cerca el final de la pandemia con los avances y los anuncios de las últimas fechas?



Tenemos que confiar en la ciencia porque es la que va a dar salida a nuestro país de cara al futuro



R.Estamos cerca de conseguir controlar esta pandemia con vacunas, y a nivel global nos llevarán los programas de vacunación entre 2021 y 2022. La vacunación es el método más eficaz de control de esta pandemia y de todas las pandemias y epidemias que hemos tenido a lo largo de la historia. Lo sabemos por los programas de vacunación anuales y los millones de niños que se salvan, entre 3 y 5 millones, solo con los programas de vacunación infantil.

 Me sorprende el temor de la gente a ser vacunados contra el SARS-CoV-2 causante de la COVID-19 que les puede causar la muerte. Habrá varias vacunas que han demostrado su seguridad y eficacia clínica, y parece ser se iniciará la vacunación progresiva en España a principios del año 2021. Es preocupante, ese escepticismo y esas afirmaciones que apuntan a que les van a meter algo extraño en el cuerpo. Nos asustamos por algo tan sencillo y eficaz como la vacunación contra el coronavirus en la que el efecto adverso es mínimo y salvar vidas es lo mejor que nos puede ocurrir.