La Diputación de Zamora ha iniciado el proceso de expropiaciones a los propietarios afectados por las obras de ensanche y mejora de la carretera ZA-L-2695, que conecta la carretera N-525 con la localidad de Cobreros.
El proyecto tiene un presupuesto base de licitación de 1.398.426,92 euros y un plazo de ejecución de seis meses desde la firma del acta de replanteo de las obras.
La actuación se desarrollará a lo largo de un tramo de aproximadamente 4 kilómetros, atravesando las localidades de Santa Colomba de Sanabria y Cobreros. El trazado actual presenta variaciones en el ancho de la calzada, que va desde los 7 metros en el inicio hasta 4,5 metros en los puntos más estrechos.
El proyecto contempla diversas intervenciones según el tramo. En los primeros 650 metros, el trazado se mantendrá sobre el eje actual, limitándose la actuación al fresado y reposición del firme existente.
Entre el punto kilométrico (PK) 0+650 y el PK 1+680, tramo que llega hasta la travesía de Santa Colomba, el trazado se desplazará hacia la margen derecha, aprovechando que los terrenos colindantes son de titularidad municipal.
En la travesía de Santa Colomba, desde el PK 1+680 hasta el PK 2+860, se reforzará el firme con una capa de 4 centímetros de espesor. A continuación, entre el PK 2+860 y el PK 3+160, el trazado se desplazará nuevamente hacia la margen derecha para evitar el Arroyo de la Mondera.
Desde el PK 3+160 hasta la travesía de Cobreros (PK 3+720), se ampliará el ancho de la calzada por ambas márgenes, manteniendo el eje de la vía actual. Finalmente, en la travesía de Cobreros se reforzará el firme existente con una capa de 4 centímetros, sin desplazamiento del trazado.
El proyecto se completa con la instalación de nueva señalización horizontal, vertical y elementos de balizamiento a lo largo de todo el recorrido. Con esta actuación, la Diputación busca mejorar la seguridad vial y las condiciones de circulación en una vía fundamental para la comarca sanabresa.