El Partido Animalista Pacma ha dado a conocer una grave denuncia realizada por varios vecinos de la localidad zamorana de Piedrahita de Castro y sus alrededores. Según estos testimonios, un grupo de habitantes del pueblo, a los que se refieren como "clan antigatos", estaría involucrado en actividades de maltrato animal, que ha provocado una "masacre felina", según indican.

La denuncia señala que algunos vecinos "han adoptado como pasatiempo" perseguir y atacar a los gatos locales, utilizando perros y escopetas de perdigones. Pacma asegura que "esta situación no es nueva", pero que se ha agravado con un incidente que involucró a la gestora de una colonia felina local. Según un comunicado del partido animalista la gestora, quien había notado una disminución del 50% en la población felina en los últimos años, sufrió un ataque a su vehículo el pasado 08 de agosto de 2023 mientras respondía a un llamamiento de auxilio por parte de un vecino preocupado por la seguridad de uno de los gatos.

A su llegada al lugar y siempre según el relato compartido por Pacma, la gestora fue confrontada por un grupo de vecinos que atacaron su vehículo, resultando en daños significativos, incluyendo la rotura de la luna frontal. La afectada tuvo que recibir atención médica de emergencia; por lo que se presentó una denuncia ante la Guardia Civil y actualmente está a la espera de resolución.

Suceso con un concejal y gatos muertos en la puerta

Pero la denuncia de Pacma no acaba aquí. En el mismo comunicado el partido relata que uno de los concejales del pueblo, afiliado al partido Zamora Sí, fue sancionado por presuntamente liberar a su perro con la intención de que atacara a una gata embarazada.

La formación explica que fruto del ataque la gata murió por desangramiento y aportan un video que capturó este incidente y fue compartido en redes sociales por un testigo. Pacma asegura que la dirección general de Zamora Sí se pronunció inicialmente sobre el asunto, mencionando que tomarían medidas. "Sin embargo, posteriormente decidieron esperar a la sentencia", añaden.

Además de estos incidentes, Pacma informa sobre la aparición de cadáveres de gatos en la residencia del alguacil del pueblo, quien ha sido responsable de alimentar y cuidar a los gatos locales durante décadas. La formación explica que en dos ocasiones, en los meses de julio y agosto, se encontraron cadáveres de gatos en su felpudo, con signos visibles de violencia.

Uno de los cadáveres fue entregado a la asociación Sacrificio Cero León, cuyos resultados de radiografía indican la presencia de perdigones en el cuerpo del animal; aunque los resultados de la necropsia están aún pendientes.

Los vecinos críticos con estas actitudes de maltrato animal han preferido mantener el anonimato debido al temor a posibles represalias, aseguran desde el partido animalista. No obstante, algunos de ellos han corroborado de manera anónima los hechos ante el equipo de prensa del Pacma.

Yolanda Morales, portavoz de PACMA, ha declarado que esta situación ha creado un ambiente de temor en el pueblo, incluso indicando que algunos vecinos viven "con puertas y ventanas cerradas por miedo a que sus propios gatos pisen la calle".

Según Morales, quien entrevistó a los testigos, los ataques de perros en las calles y el uso de armas como escopetas de balines y aire comprimido para atacar a diversas especies parecen ser prácticas habituales en la zona desde hace años.

A pesar de que estos incidentes han ocurrido a lo largo del tiempo y aseguran que son recurrentes, los vecinos que se oponen a estas acciones han evitado enfrentar directamente la situación por temor a represalias. Sin embargo, algunos de ellos han proporcionado testimonios anónimos sobre la veracidad de estos eventos al gabinete de prensa del Pacma.