La Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora ha confirmado la muerte de 12 reses afectadas por la enfermedad hemorrágica epizoótica en ocho explotaciones de la provincia. En ellas se han confirmado 47 casos, a los que se podrían sumar otros tantos tras la investigación de otras 39 sospechas presentadas en un escrito por varios veterinarios de la provincia "en el libre ejercicio de su profesión", como ha indicado la delegada territorial de la Junta en Zamora, Leticia García.
Según se ha indicado desde el Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería de la Junta, todas las reses afectadas en las unidades veterinarias de Zamora, Sayago y Fuentesaúco corresponden a ganado extensivo.
Leticia García ha explicado que la mortalidad de las reses en Zamora está en un 1,2% en base al censo de mil animales afectados hasta el momento. Según los datos aportados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Ganadería, el nivel de mortalidad de Zamora estaría dentro del estándar que se comparte en el resto de provincias.
Además, la delegada territorial de la Junta en Zamora ha desvelado que se tiene "en sospecha" dos explotaciones más en Cabañas de Sayago, a las cuales se están tomando muestras para saber si también están infectadas con la EHE.
39 casos comunicados por los veterinarios
Leticia García también ha informado de que la Delegación Territorial de Zamora ha recibido un escrito de veterinarios en ejercicio libre de la profesión que señala un total de 39 casos de la enfermedad en explotaciones de las zonas de Sayago, Fuentesaúco y Zamora.
Según Leticia García, la Junta está llevando a cabo una minuciosa depuración de este escrito recibido, ya que algunos de los casos podrían coincidir con los datos ya registrados en la sección de sanidad animal de la Junta.
La delegada subrayó la importancia de investigar y estudiar estos casos para obtener más información sobre la enfermedad, aunque reconoció que debido al periodo en el que se produjeron las muertes de los animales (del 5 al 28 de agosto), que coincidió con un periodo de máximo calor, es posible que las altas temperaturas hayan agravado la sintomatología y las muertes.
En relación con las medidas tomadas por la Junta, García enfatizó que se ha observado un aumento en las sospechas de casos clínicos y que se está llevando a cabo un estudio y seguimiento de las explotaciones afectadas. Se está realizando un análisis de los índices de mortalidad y morbilidad, así como de la evolución de la enfermedad en las explotaciones con síntomas compatibles. Además, se comunicó que se está trabajando en una instrucción en los servicios territoriales de agricultura, ganadería y desarrollo rural para agilizar la comunicación de casos y la toma de muestras.
La delegada ha recalcado una vez más que la enfermedad hemorrágica epizoótica es una enfermedad de declaración obligatoria, por lo que tanto los ganaderos como los veterinarios que trabajan en las explotaciones deben informar a la Junta de Castilla y León en caso de detectar síntomas compatibles con la enfermedad.
Leticia García también ha recordado que la enfermedad ha afectado a diversas provincias de la península, y que se ha extendido por todo el país hasta el momento, a excepción del norte.
En cuanto a las medidas para combatir la enfermedad, Leticia García mencionó que actualmente no existen vacunas ni tratamientos específicos, y las recomendaciones se centran en el uso de insecticidas y repelentes para evitar la propagación del mosquito vector. También se enfatizó en la importancia de facilitar el acceso al agua y la alimentación al ganado, así como tratar los síntomas con los medicamentos adecuados bajo prescripción veterinaria.
La delegada aclaró que la enfermedad hemorrágica epizoótica no afecta al consumo de carne, leche ni piel de los animales, y que no hay motivo para generar alarma entre los consumidores.
Por último, subrayó que desde el Ministerio de Agricultura se había informado que esta enfermedad afectaba fundamentalmente a ciervos, corzos y gamos, pero que se ha ido extendiendo a otros animales. "En el ganado vacuno, la clínica que produce, en principio, es moderada y autolimitante durante unas dos semanas", añadía. Y también apuntaba que en el caso del ovino, este es susceptible a la infección, "pero poco susceptible a la enfermedad clínica y en el caprino es muy poco susceptible ya a la infección".
Así se lo ha trasladado a las organizaciones agrarias, a las que convocaba hoy, 30 de agosto, a una reunión para abordar la situación y proporcionar información actualizada sobre la enfermedad a los ganaderos. La Junta está trabajando en colaboración con otras instituciones para estudiar la enfermedad y buscar posibles soluciones preventivas.
También se les indicará que aquellas unidades veterinarias en las que ya se hayan registrado casos, no será necesario la toma de muestras en los animales que presenten síntomas compatibles con la enfermedad, "pero sí es necesario declararlas", ha insistido la delegada territorial.