Con motivo de los últimos sucesos acaecidos en nuestro país en relación a la violencia de género, la Subdelegación del Gobierno en Zamora ha convocado esta mañana en la Plaza de la Constitución una concentración silenciosa como muestra de apoyo a las víctimas y de total rechazo, una convocatoria que ha surgido de forma espontánea, sin tiempo para llamar a la ciudadanía ni a las asociaciones que trabajan para erradicar la violencia contra la mujer, según ha reconocido el subdelegado, Ángel Blanco.

A la concentración han acudido el alcalde de Zamora y la presidenta de la Diputación en funciones, así como representantes de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y de los grupos políticos representados en las instituciones.

Con este acto simbólico, las instituciones zamoranas han querido recordar a la víctima número 1.000 de violencia de género, desde que se contabilizan, en 2003. "Unanimidad, respuesta y consenso de todas las administraciones", ha apuntado el subdelegado, "tenemos que recordar que la violencia de género es un problema estructural, que afecta a todos los niveles de la sociedad, y tenemos que intentar entre todos erradicar esta lacra del paisaje cotidiano", ha subrayado, "y no podemos dejar en este momento de recordar a dos zamoranas, a Leticia y a Laura".