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El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, y el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, junto al subdelegado del Gobierno, Jacinto Canales, han visitado este miércoles las obras de construcción de 50 viviendas colaborativas en la calle Mieses.

Una promoción destinada al alquiler social para jóvenes impulsada por la Junta de Castilla y León, a través de SOMACYL, con el dinero llegado desde Europa y gestionado por el Gobierno central y con la colaboración del Ayuntamiento de Valladolid, que ha cedido el suelo.

Esto supone que como suele pasar en estas situaciones, haya una guerra de cifras por ver quién ha puesto más para poder poner en marcha este proyecto.

El proyecto, con una inversión total de 6,6 millones de euros, forma parte de la estrategia conjunta entre ambas administraciones para ampliar el parque de vivienda pública asequible en la ciudad.

“Para su elección habrá una convocatoria donde las personas que cumplan los requisitos de ingresos y de edad se inscribirán. En el momento que se abra, habrá un sorteo ante notario y ahí se determinarán los 50 beneficiarios de las 50 viviendas”, vaticinó el consejero. También manifestó que la ausencia de beneficio industrial de Somacyl, que ejecuta la obra, permite “perdonar a los jóvenes un 20 por ciento”. “No nos cabe ninguna duda de que nos las van a quitar de las manos”, incidió.

Las obras avanzan en un edificio en forma de L con zonas comunes para coworking, lavandería, aparcamiento de bicicletas y espacios de convivencia, además de un patio interior naturalizado. El inmueble contará con 65 plazas de aparcamiento y 50 trasteros y estará conectado a la red de calor con biomasa, garantizando eficiencia y sostenibilidad energética.

Durante la visita, Carnero ha destacado que “facilitar el acceso a los jóvenes a una vivienda asequible es apostar por una ciudad viva, con futuro y con cohesión social”. El alcalde subrayó la “buena coordinación entre administraciones”.

Por su parte, Suárez-Quiñones ha defendido el modelo de vivienda colaborativa, que promueve “una nueva forma de habitar, basada en la convivencia, la sostenibilidad y la innovación social”.

“La característica singular que tienen estas viviendas dirigidas a jóvenes es que tienen unas zonas comunes de ‘coworking’, ‘coliving’, apartamentos de bicicletas, de coches de niños, de convivencia. Son 250 metros cuadrados de zonas comunes”, explicó el consejero.

Actualmente, Ayuntamiento y Junta desarrollan cinco promociones en Valladolid, con un total de 457 viviendas en alquiler, de las que 394 son colaborativas, además de las promovidas por la Sociedad Municipal de Suelo y Vivienda (VIVA), que elevan a más de 650 las viviendas destinadas preferentemente a jóvenes.

Así, y tras señalar que “otras comunidades tienen más problemas”, reclamó al Ministerio de Vivienda que “interceda” en Europa para ampliar ese plazo.

Financiación estatal con fondos europeos

A la visita también ha asistido el subdelegado del Gobierno en Valladolid, Jacinto Canales, quien recordó que esta promoción cuenta con una subvención de 2,2 millones de euros del Gobierno de España, a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) financiado con fondos Next Generation EU. Esta ayuda supone el 36,6% del coste total del proyecto.

Canales explicó que esta actuación forma parte de las cinco promociones de vivienda financiadas en la provincia con fondos europeos, que suman 402 viviendas y una inversión de 19,5 millones de euros aportados por el Gobierno central. Entre ellas se incluyen las 152 viviendas en Parque Alameda, 114 en Parquesol, 59 en el Sector 12-Los Viveros y 27 en Medina del Campo.

En el conjunto de Castilla y León, el PRTR financia más de 19.000 rehabilitaciones de viviendas con una aportación de 138 millones de euros y 54,4 millones para la construcción de 1.200 viviendas nuevas.