Tordesillas ha vuelto a vivir un fin de semana que ha estado repleto de sabor y también de creatividad culinaria. Todo con la XIII edición del Concurso de Tapas Todos Los Santos. Un certamen que ha reunido a un total de 13 establecimientos locales en torno a tres jornadas que han sido de intensa actividad gastronómica.
El broche final ha llegado este martes en el Auditorio El Carmelo, que ha sido el escenario de la gala de entrega de premios. El Restaurante El Figón se ha alzado con el primer premio gracias a su propuesta ‘San Antón’, una tapa elaborada con carne de cerdo y miel que ha conquistado al jurado por “su equilibrio y sabor”.
El segundo premio ha recaído en el Parador de Tordesillas con su tapa ‘San Vicente’ que pasa por ser un rulo de gallo de corral al estilo turresillano, envuelto y frito en corn flakes y acompañado de salsa de maíz y huevo.
Por su parte, el tercer premio ha sido para Por fin Café que presentó ‘San Calixto’, un panipuri de carne mechada con mayonesa de piparras, destacando por su original presentación y mezcla de sabores.
El Bar Plaza Mayor obtuvo el reconocimiento a la Tapa Más Original con ‘San Antonio Abad’, un éclair de lechazo guisado con mayonesa sweet chili, mientras que el Premio Especial del Cliente fue para el Restaurante Los Toreros, con su tapa ‘San Gregorio y su pata de pollo’, un bombón colombino de pollo y jamón con salsa de maracuyá.
Además, el jurado concedió dos accésit en esta edición: uno al Restaurante Viky, por ‘Ofrenda de Dioses’, un guiso de buey y boletus recubierto de bechamel suave y crujiente japonés, y otro a la cafetería El Corral de la Muda, con ‘La Santita’, una albóndiga de carne acompañada de puré de castañas.
El jurado profesional estuvo integrado por destacados cocineros de la provincia: Víctor Pérez Pelaz (jefe de cocina y propietario de Casa del Arte, en Simancas); Iván Ortiz Torices (jefe de cocina de Buenabrasa, en Zaratán); Teo Rodríguez García (jefe de cocina y propietario del restaurante Trasto, en Valladolid); y Toni Giménez (ex jefe de cocina de Bodega de Arzuaga, en Quintanilla de Onésimo). Todos ellos subrayaron “la dificultad de elegir una sola opción”, dada “la calidad y el nivel general de las propuestas”.
Sus valoraciones coincidieron con las del jurado misterioso, formado por Esther Bermejo, y Paula de las Heras, médica y profesora de Medicina en Valladolid, quienes también destacaron la originalidad de las tapas presentadas.
Durante la ceremonia, la primera teniente de alcalde de Tordesillas, Verónica Gil, expresó su orgullo por la continuidad y éxito del certamen, afirmando que “trece ediciones reflejan el talento, la dedicación y la pasión de la hostelería de Tordesillas”.
Gil quiso reconocer “el esfuerzo, la creatividad y el compromiso de los hosteleros participantes”, agradeciendo su labor por “seguir haciendo de la gastronomía de Tordesillas un ejemplo de calidad, innovación y hospitalidad”. Asimismo, subrayó que “el Concurso de Tapas Todos los Santos no es solo un evento gastronómico, sino un reflejo del dinamismo de un sector fundamental en el tejido empresarial y económico del municipio”, reiterando el compromiso del Ayuntamiento por “seguir apoyando y potenciando el enorme talento culinario local”.
La gala contó con la asistencia de miembros de la corporación municipal, representantes de todos los grupos políticos, así como de la Ruta del Vino de Rueda y la Diputación de Valladolid. En representación de esta última acudió Moisés Santana, diputado de Promoción Agroalimentaria y Consumo y presidente del Patronato de Turismo, quien destacó “el potencial de esta cita y el creciente papel de la gastronomía en la promoción de nuestros municipios”.
El acto fue conducido por la actriz Béatrice Fulconis y amenizado por los cómicos Roberto ‘Chapu’ y Fran ‘El Chavo’, en sus papeles de ‘Nano y Nino’, que llenaron de humor y carcajadas el auditorio con una actuación que arrancó la ovación del público.
De este modo, Tordesillas cerró una nueva edición del Concurso de Tapas Todos los Santos con un éxito rotundo de participación y asistencia, consolidando su posición como uno de los encuentros gastronómicos más destacados de la provincia de Valladolid.
