Adelante Valladolid ha denunciado las obras de la reforma integral en la estación de autobuses de Puente Colgante de Valladolid, a través de un comunicado recogido por EL ESPAÑOL de Castilla y León.
En su escrito apuntan que se trata de una “intervención ilegal”, según el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Valladolid y “un derroche inaceptable de cinco millones de euros de fondos públicos”.
Desde Adelante Valladolid añaden que la Junta “invierte en un edificio condenado a la demolición” mientras que la nueva estación de autobuses intermodal de Delicias “sigue abandonada en un cajón”.
Razones
Desde Adelante Valladolid dan las razones para argumentar esta denuncia asegurando que el PGOU “establece que la actual estación debe ser demolida y trasladada a Delicias, junto a la estación de trenes antes de 2032” por lo que “la actual estación de Puente Colgante está declarada fuera de ordenación”.
Apuntan que según el artículo 185 del Reglamento Urbanístico de Castilla y León (RUCyL), en situaciones como estas “solamente están permitidas obras de emergencia”. Sin embargo, el proyecto actual “viola la normativa al tratarse de una rehabilitación integral y o modernización y rehabilitación del conjunto arquitectónico”.
Desde Adelante Valladolid señalan además que desde el Área de Urbanismo del Ayuntamiento de Valladolid “en lugar de exigir la preceptiva licencia urbanística” se “permitió el inicio de las obras con una Declaración Responsable (DROU)”.
Para ellos esto es “una treta para que el consistorio cumpla con su deber de control de la legalidad”.
Denuncia
“La normativa es clara. El PGOU de Valladolid indica que la actual estación debe demolerse, no rehabilitarse, ni reformarse íntegramente ni modernizarse. Es inconcebible invertir cinco millones en reformar un edificio que debe desaparecer en menos de siete años”, añaden.
Vuelven a recalcar que “las obras de Estación de Autobuses de Valladolid son un despilfarro de dinero público” y por eso exigen que “se adecenten urgentemente los baños y reparen las goteras empleando los fondos justos y necesarios”.
Para Adelante Valladolid la “prioridad” de la Junta “debe ser acelerar el proyecto de la nueva estación de autobuses de Delicias para que Valladolid tenga por fin una estación decente”.
Por todo ello han presentado una “denuncia formal” para que el Ayuntamiento de Valladolid “active su deber de control y paralice las obras”.
“Lucharemos por una gestión transparente, legal y al servicio de la gente. No permitiremos que se burle la ley ni se malgasten recursos públicos”, finalizan en su escrito.
Una denuncia que cuenta con el apoyo de la nueva Plataforma por la Integración Ferroviaria contra la reforma de la estación y pide también que “los fondos se destinen a la nueva”.
Zarandona dice que son obras “legales”
El concejal de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Valladolid, José Ignacio Zarandona, ha respondido a Adelante Valladolid y a la Plataforma por la Integración tras la polémica.
“Sobre la ilegalidad de las obras hay que dejar las cosas claras de una vez. El solar de la estación se encuentra dentro de un área de planeamiento previo. Es un sector de suelo urbano no consolidado con ordenación detallada”, ha apuntado.
Ante esta situación, ha añadido, nos encontramos con “un uso y una edificación calificado como disconforme con el planeamiento vigente”, ha añadido Zarandona, señalando que a todas luces “la actuación propuesta se ajusta a las actuaciones permitidas”.
Ha citado, además, el artículo 503 del Plan General que dice, en su apartado b, que estas actuaciones “para mejorar las condiciones de accesibilidad, salubridad o seguridad” que avalaría la actuación en la estación.
“Esto de las licencias o DROUS son actos reglados. No va en función del presupuesto. Depende de la intervención”, ha afirmado Zarandona señalando que el Plan General “no establece que algo deba ser demolido” sino que “solo habla de construcciones disconformes con el plan o edificaciones fuera de ordenación”.
Zarandona ha recalcado que son “obras absolutamente legales” llevadas a cabo con “intervención de los técnicos” en un “acto reglado” que está “amparado por el articulo 503 del planeamiento en vigor”.
Ha pedido “cesar en las elucubraciones” porque la actuación en la estación de autobuses es “algo que todos estábamos esperando” y que “necesitábamos de una estación remodelada”.