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La ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha hecho una comparativa entre el comentario machista que hizo saltar las chispas en la Asamblea de la Comunidad de Madrid este jueves, 13 de febrero, y un episodio polémico que se vivió cuando León de la Riva era alcalde de Valladolid. 

"No me pongas morritos que me desconcentro", fueron las palabras denunciadas por el grupo regional de Más Madrid y que fue pronunciado por el consejero de Vivienda del gobierno autonómico, Jorge Rodrigo, a una de sus diputadas.

Unas declaraciones que la ministra ha tildado de "lamentables" y afirmaba que le recordaba un episodio vivido en 2010 entre León de la Riva y la exministra de Sanidad Leire Pajín cuando dijo: "Cada vez que le veo la cara y esos morritos pienso lo mismo".

Así lo ha manifestado durante su visita a la exposición ‘Ocupar el espacio’ de la plataforma Mujeres Artistas Profesionales de Valladolid. Y, además, lamentaba que la sociedad "ha avanzado poco" y que aún queda "mucho por delante".

Asimismo, añadía que el machismo es "estructural, transversal y no conoce ni de clases sociales ni de capacidades económicas ni de profesiones". Redondo recordaba que esta discriminación sexista está "inserto" en la vida de muchos hombres y mujeres y que, en el momento menos pensado, "te encuentras con declaraciones absolutamente machistas de dominación y de violencia hacia las mujeres".

La ministra de Igualdad asegura que esta situación le ha provocado "tristeza y rabia" como mujer al descubrir que "los mismos clichés, tics, los encontramos en cualquier lugar". Y volvía a incidir en que le recordaba a León de la Riva "en aquel penoso día y aquella penosa declaración". 

"Nadie duda de Jenny"

La Audiencia Nacional prevé dejar este viernes visto para sentencia el juicio al expresidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, por el beso que dio a la jugadora Jenni Hermoso tras la final del Mundial de 2023.

En este sentido, Redondo confía en que la Ley de Libertad Sexual, "que interpela directamente al patriarcado, machismo y pone el consentimiento en el centro de las relaciones sexuales", lleve a tener una "sentencia acorde a la legislación".

Una ley de la que, afirma, es "para sentirse orgullosa" porque "impide cuestionar sistemáticamente" la palabra de las mujeres. Del mismo modo, añadía que "nadie cuestiona a Jenni" y que confía en que haya una "sentencia acorde".

"No hay que cuestionar la palabra de las mujeres, como siempre se ha hecho, poninedo en duda su veracidad y la voz de la mujeres. Eso ya no es una discusión, no está en duda", afirma.