La Policía Nacional de Valladolid detiene a un hombre por detención ilegal, robo con violencia y estafa a una trabajadora de una inmobiliaria que amordazó, mientras le enseñaba un piso de alquiler, para robarle la tarjeta de crédito y retirar el dinero en un cajero.
Asimismo, se le imputan delitos de atentado a agentes de la autoridad, daños y quebrantamiento de condena por no haberse reincorporado a la prisión de Topas en Salamanca tras un permiso penitenciario.
Todo comenzó en la tarde del pasado martes cuando acudía a dependencias policiales una mujer que denunciaba haber sido víctima de una detención ilegal y un robo. A primera hora de la mañana del 20 de diciembre, un hombre acudía a la inmobiliaria del centro de la ciudad pidiendo una casa de alquiler. Por ello, se concretó la visita una hora más tarde.
Ambos llegaron al domicilio y, cuando llegaron al último dormitorio, el hombre se lanzó contra ella agarrándole por detrás del cuello. La arrojó contra la cama y se golpeó la cara donde el agresor siguió agarrándola, indicándole que hiciera todo lo que él mandaba. Más tarde, la amordazó y maniató con cinta americana.
Una vez que estaba inmovilizada, el hombre registró sus pertenencias llevándose el teléfono de la empresa, la tarjeta de crédito y dinero en efectivo. Además, le solicitó el número PIN de la tarjeta. El hombre se marchó dejándola atada.
El hombre regresó y le dijo a la mujer que dijese que había sacado ella los 600 euros con la tarjeta. También le amenazó: "No se lo cuentes a nadie, sé dónde vives tú y tu familia". La mujer pudo llegar al trabajo y su jefa vio el estado en el que se encontraba y la llevó a un centro de salud, donde le detectaron un politraumatismo.
Los agentes pudieron identificar a un hombre a 20 metros de la casa donde se habían producido los hechos. El hombre llevaba bolsas de comida y bebida con la intención de quedarse en el domicilio. En la detención, forcejeó con los policías, y se detectó que portaba un juego de llaves del domicilio donde había ocurrido todo.
Durante el traslado, escupió a los agentes y golpeó el coche causando daños en el interior.