Valladolid implantará medidas "en algunas zonas" para luchar contra el ruido a consecuencia del ocio nocturno de la ciudad. Así lo ha asegurado el regidor Óscar Puente en rueda de prensa, aunque no ha desvelado en que sitios será. Si bien es cierto que estas zonas están bien diferenciadas en la urbe, entre las que destacan la Plaza de San Miguel, la calle Pasión o la Plaza de Martí y Monsó.
Puente ha asegurado que la preocupación del Consistorio por esta problemáticas es "toda" y que "por supuesto" que se escucha a los vecinos de la zona de centro. Unas declaraciones que vienen a cuento de la presentación de un escrito por parte de los vecinos al Procurador del Común, en el que niegan que sean escuchados por parte del Gobierno Municipal. "Me sorprende que digan eso porque se ha creado una mesa en torno al problema y estamos permanentemente trabajando con los vecinos y con las propias empresas de ocio nocturno", ha aclarado.
Precisamente, ha ejemplificado ese trabajo en las propuestas de la concejala de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, María Sánchez, que ha planteado "algunas" de estas medidas a tomar en algunas zonas en los consejos de gobierno. "Estamos preocupados por el ruido y por el bienestar de los vecinos. Vamos a trabajar para adoptar medidas y mejorar su situación intentando hacerlo de la mano de los empresarios de hostelería que entiendo que son y deben ser los primeros preocupados porque los negocios no son sostenibles si no lo es lo que se genera en el entorno", ha aclarado.
Sin embargo, el alcalde se ha visto a obligado a llevar la contraria a algunos de estos vecinos, de los que justo hoy leía alguna reflexión en la que hablaban de una evolución "negativa" en el ocio nocturno desde el año 2019. "No puedo estar de acuerdo. He vivido aquí toda la vida y el de hoy dista mucho de ser el de hace 20 años", ha aseverado Óscar Puente.
"Antes se salía miércoles, jueves, viernes y sábado, y hoy se sale sábado y un poco el jueves. Había mucho más local de ocio nocturno. Viví 10 años en la plaza de San Miguel y había muchos locales que hoy ni si quiera existen", ha añadido. Asimismo, ha puntualizado que en estos momentos hay un parámetro de exigencia en torno al ruido, al confort y al derecho al sueño "distinto". "El listón está más alto y lo entiendo", ha aseverado.
Por último, Óscar Puente ha aclarado que los problemas se generan "fuera de los locales". "Están blindados, insonorizados, es en la calle y ahí las medidas son complicadas. Hay que establecer soluciones que no van a ser fáciles, pero que son las que tienen que contribuir a que la vida en las casas sea mucho más razonable", ha sentenciado.