Dos graves sucesos sacudían en la mañana de este lunes la localidad vallisoletana de Tordesillas. En la madrugada, un joven de 29 años era atendido por heridas de arma blanca en el Punto de Atención Continuada del centro de salud del municipio ayudado por agentes de la Guardia Civil y de Emergencias Sacyl. El hombre denunció que había sido apuñalado por su pareja.

Horas más tarde, en torno a las 10.00 horas, una vecina de la vivienda que ambos compartían hallaba muerta a la mujer en el patio de luces del edificio ubicado en la calle Guillén de Rhoan. El cuerpo se hallaba tendido en el suelo, boca abajo.

La conexión entre ambos sucesos dejó abierta la puerta a todo tipo de hipótesis. Sin embargo, en las últimas horas, y tras conocerse los primeros informes de los peritos, fuentes cercanas al caso apuntan a que cobra fuerza la hipótesis de que la mujer podría haberse arrojado al vacío. Y es que, según las mismas fuentes, no se han encontrado, al menos hasta el momento, indicios de violencia sobre el cuerpo de la fallecida.

Convivían en el mismo domicilio

“Convivían en el mismo domicilio. Se ha encontrado el cuerpo sin vida de la mujer. Hemos avisado a la Unidad de Violencia de Género, por si acaso, pero no podemos confirmar nada”, aseguraba a primera hora de ayer Emilio Álvarez, subdelegado del Gobierno en Valladolid.

A las tres de la madrugada, el hombre se había presentado en Urgencias para ser atendido e informó a los sanitarios que la herida se la había producido su pareja con un cuchillo, momento en el que la Guardia Civil recogió el aviso de la búsqueda de la mujer.

Los forenses y la Policía Científica recabaron todo tipo de pruebas durante todo el día para arrojar luz sobre la investigación.

El caso está bajo secreto de sumario.