La sección de Hostelería, Restauración Social y Turismo de la Federación de Servicios Movilidad y Consumo de UGT ha anunciado hoy que ha llevado ante la Inspección de Trabajo de Salamanca la situación que están viviendo los trabajadores de los comedores escolares de los más de 60 centros de la provincia, que, según el sindicato, no han cobrado la nómina del mes de noviembre.

En el escrito, el sindicato exige que se compruebe los extremos respecto a cotizaciones de la empresa y se tomen las medidas oportunas sobre el impago de estos salarios, añadiendo todos los datos de las empresas que intervienen en la adjudicación de la licitación, vigente hasta 2014. 

Igualmente, han señalado en un escrito que han conocido, "de manera informal", la postura de la administración educativa. Este lunes, UGT ha registrado la denuncia en los diferentes departamentos de educación con implicación en el asunto. Han puntualizado que han pedido la información "clara" sobre la situación económica, además de una petición "expresa" de fecha en la que se prevé que comience a prestar servicio la empresa nueva adjudicataria del servicio, y, "como no puede ser de otra forma", han reclamado la responsabilidad subsidiaria de la propia administración como "responsable última del servicio", además de ser informados de las medidas a tomar por el "incumplimento contractual" como este.

Desde el sindicato han tildado este entramado como "muy grave", al tiempo que han remarcado que les "preocupa" las intenciones de la empresa, que ha dejado de "abonar las nóminas" a los trabajadores. "Creemos que la prestación del servicio puede verse comprometida en las próximas fechas, máxime con una licitación abierta y sin fecha de inicio de la nueva empresa, con incertidumbre de quien asumirá las deudas que han empezado a generarse", han subrayado.

Por último, han sopesado iniciar movilizaciones, de las que se informará "convenientemente".