En el Día Mundial de la Eficiencia Energética, el Ayuntamiento de Salamanca refuerza su compromiso para reducir gastos en consumo y al mismo tiempo contribuir a la mejora del medioambiente, dentro del Plan de Ahorro y Eficiencia Energética para disminuir las emisiones contaminantes y siguiendo las directrices de Savia, la Estrategia de Infraestructura Verde para hacer de Salamanca una ciudad más saludable y con una mayor calidad de vida. Con las medidas puestas en marcha en 2021, el Consistorio ha logrado reducir el gasto en consumo energético en otros 347.000 euros anuales, que se suman a los 166.000 del año 2020 y a los 138.000 euros ahorrados entre 2017 y 2019.

El Consistorio ha realizado continuas reformas en el alumbrado público, instalando el año pasado 779 nuevas luminarias de tecnología LED en sustitución de las antiguas. De esta manera, se ha logrado reducir la potencia instalada para propiciar un ahorro de energía consumida de 499.315,29 KW/h cada año de alumbrado y un ahorro económico de 149.794,59 euros anuales, según los precios actuales de la electricidad.

Las ventajas de la actual tecnología LED son, por un lado, el mayor rendimiento global de la luminaria, y por otro lado, los mejores factores de utilización conseguidos en las instalaciones gracias a la exactitud en el control de la luz de las lentes utilizadas. Lo que facilita aportar la luz necesaria sólo en las superficies que se pretenden iluminar, sin provocar contaminación o intrusión luminosa en otras zonas no deseadas o pretendidas, permitiendo reducir el flujo luminoso necesario y la potencia instalada.

Además, esta tecnología incluye una regulación autónoma programable en la propia luminaria, lo que asegura la reducción de flujo luminoso en las horas nocturnas de menor afluencia en las calles y la correspondiente reducción de energía consumida. A mayores, los costes de mantenimiento de las luminarias LED son inferiores a los de las luminarias de descarga al no precisar la reposición de lámparas.

A mayores, el Ayuntamiento ha evitado un sobrecoste de 197.211,60 euros gracias a la contratación del suministro eléctrico a través de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) antes de producirse el alza de precios.

El Consistorio disponía de 102 contratos de suministro eléctrico de más de 10 KW para dependencias municipales, con contrato vigente hasta el 30 de noviembre de 2021. Con previsión y anticipación suficiente, el 27 de julio se solicitó por parte del Gestor Energético Municipal el inicio del expediente para la contratación de los suministros de electricidad en dependencias municipales con energía 100% procedente de fuentes renovables al amparo del acuerdo marco para el suministro de electricidad en alta y baja tensión de la central de contratación de la FEMP.

Ante la situación inevitable de pasar al TUR transitorio, el pasado 26 de noviembre se solicitaron tres ofertas a los principales operadores del mercado por una duración de un año sin posibilidad de prórroga, de manera que pueda garantizarse el suministro eléctrico en dependencias municipales, iniciándose en paralelo los trámites para una nueva licitación. El resultado es el ahorro del sobrecoste reseñado.

Instalación de paneles fotovoltaicos y mejora de la producción térmica con energías renovables

Respecto a la energía fotovoltaica, en los huertos urbanos la instalación de placas con una potencia de 25 KW proporciona electricidad a todo el alumbrado público nocturno y al funcionamiento de la nave de aperos, lo que permite el autoconsumo de todo este nuevo parque público de más de 100.000 metros cuadrados.

Esta mejora se suma al funcionamiento de 110 paneles en la Biblioteca Municipal Torrente Ballester, con una potencia total de 35 KW, que permiten un ahorro anual en torno a 15.000 euros y la reducción de la emisión directa de 13,83 toneladas de CO2, equivalente a la plantación de casi 1.400 árboles.

Por otro lado, una de las estrategias del Plan de Eficiencia Energética es la transición ecológica hacia nuevas energías. En este sentido, destacan la introducción de la biomasa en el Pabellón de Würzburg, en el Centro Municipal Luis Vives, en el Parque de Bomberos y en la nueva Casa de las Asociaciones. Mediante el control de temperaturas se consigue regular al funcionamiento de las calderas, consiguiendo ahorros superiores al 25%.

Estas mejoras tendrán su continuidad este año 2022 con cuatro proyectos de instalación solar fotovoltaica y otros cuatro de instalación solar térmica en edificios municipales, dentro de la primera convocatoria de ayudas a la inversión en instalaciones con fuentes de energía renovable en la comunidad autónoma de Castilla y León, cofinanciadas con fondos europeos. En total, se instalarán 615 paneles fotovoltaicos y 79 unidades térmicas en el Parque de Bomberos, el cuartel de la Policía Local, el Centro Municipal Integrado Julián Sánchez ‘El Charro’ y el centro municipal de Vistahermosa.

La instalación de paneles fotovoltaicos permitirá la implantación de sistemas de generación de energía eléctrica para autoconsumo, mientras que los sistemas de energía térmica facilitarán alcanzar las temperaturas necesarias para todas las demandas de agua caliente. El ahorro anual estimado será del 30%, amortizándose la inversión realizada en cuatro años.

Ahorro de agua con el sistema GAP y la telegestión de riego

Finalmente, entre las medidas para contribuir a la reducción del consumo energético están las relacionadas con el ahorro de agua. Por ejemplo, con el sistema de Gestión Activa de Presiones (GAP) se ha logrado un ahorro neto de unos 7.558.376 metros cúbicos en cuatro años de funcionamiento, lo que equivale al suministro de una población de unos 20.000 habitantes durante cinco años.

Con la implantación del GAP se aumenta en dieciséis años la vida útil de las tuberías y se disminuyen las pérdidas de agua, al regular la presión en la red cuando hay menor demanda e ir optimizándola. También propicia que se necesite producir en la estación potabilizadora menos cantidad, lo que supone un ahorro equivalente al consumo medio anual de una población de quince mil habitantes.

De esta forma, el Ayuntamiento consigue no sólo aumentar la calidad del servicio que presta a los vecinos, mejorando la presión en los domicilios y reduciendo las molestas consecuencias de las averías en la red, sino también un menor derroche de agua.

Otra medida importante en el ahorro de agua es el sistema de telegestión de riego ya presente en casi la cuarta parte de la superficie de zonas verdes de la ciudad, que permite una reducción de hasta el 40% del consumo de agua.

Este sistema no sólo permite realizar una planificación de manera inmediata según los datos recogidos por los sensores, sino que también éstos detienen el riego en caso de lluvia, recalculando la cantidad necesaria posteriormente. También supone una utilización más racional de los recursos, pues la telegestión evita desplazamientos a los operarios municipales para proceder a la programación manual de equipos. Así, pueden conocer a distancia el estado real de las horas a regar, de los equipos y de los sensores.

El sistema de telegestión de riego se compone de un programador central, con un kit emisor que envía una señal de radio digital codificada a los receptores autónomos que activan las electroválvulas. El control de los riegos se realiza a través de una aplicación de teléfono móvil o tablet, que permite ajustar la dosis de riego de acuerdo con los datos aportados por una estación meteorológica asignada.

A mayores, el Ayuntamiento construirá un aljibe para economizar el consumo de agua en huertos urbanos y zonas verdes junto a la ribera del Tormes, por un total de 27,5 hectáreas, así como una planta fotovoltaica con sistema de baterías de almacenamiento para autoconsumo eléctrico, favoreciendo así la eficiencia y el ahorro energético.