Escasa respuesta ciudadana es la que está teniendo por ahora la convocatoria de ayudas de emergencia social realizada por el Ayuntamiento de Salamanca dirigida a aquellas personas que se han visto especialmente afectadas por las repercusiones de la covid-19. Pese a que el Consistorio ha desplegado una amplia campaña de divulgación de esta nueva convocatoria -la segunda que pone en marcha para atender a vecinos de la capital salmantina que soportan serias dificultades por los efectos económicos de la covid-, lo cierto es que el eco ciudadano generado está siendo bastante escaso.

El plazo de presentación de nuevas solicitudes para esta segunda convocatoria se abrió el pasado 26 de mayo y, pese a haber transcurrido mes y medio aproximadamente desde su apertura, la respuesta ciudadana está siendo bastante tímida. Buena prueba de ello es que desde ese 26 de mayo hasta el pasado 7 julio -son los últimos datos que tiene recopilados el Ayuntamiento- solo se han recibido en el área de Bienestar Social 107 ayudas. Se trata, desde luego, de una cifra muy escasa teniendo en cuenta los enormes perjucios que la pandemia y las restricciones asociadas a la misma han ocasionado. De todos modos, es previsible que esta cifra vaya aumentado progresivamente, dado que el plazo para optar a las ayudas permanecerá abierto hasta el próximo 4 de diciembre.

Esta segunda convocatoria de las prestaciones económicasde urgencia social a consecuencia de situaciones de fuerza mayor sobrevenida cuenta con un presupuesto de un millón de euros. Pueden optar las mismas familias empadronadas en el término municipal de Salamanca con al menos una antigüedad de seis meses que hayan pasado a estar en alguna de estas situaciones:



a) Situación de desempleo

b) Sujeta a un Expediente Temporal de Regulación de Empleo (ERTE)

c) Sujeta a situación de Expediente de Regulación de Empleo (ERE)

d) Haya visto reducida su jornada laboral

e) Haya cesado su actividad en el caso de ser un trabajador por cuenta propia

d) Otras circunstancias similares vinculadas a la actividad laboral o empresarial.

Las ayudas están destinadas a afrontar gastos básicos, como alimentación, higiene, alquiler, hipoteca o gastos corrientes. «El objetivo es complementar los ingresos de las familias que los han visto reducidos como consecuencia de un cambio laboral derivado del covid-19», señaló la concejala de Familia e Igualdad de Oportunidades, Ana Suárez, el día de la presentación de esta segunda convocatoria el pasado mes de mayo.

Se establece qu pueden solicitar la ayuda personas y familias emnpadronadasen Salamanca con al menos seis meses de antigüedad, cuya unidad familiar tuviera ingresos inferiores a 47.451,6 euros hasta la declaración el estado de alarma. Este límite se incrementará en función del número de hijos o de personas mayores de 65 años que convivan en la unidad familiar, de que exista algún miembro con discapacidad, dependencia o incapacidad laboral o en el caso de monoparentales.

Asimismo, podrán optar aquellos afectados laboralmente por la crisis derivada de la pandemia que en el momento de presentar la solicitud no lleguen al importe de la prestación contributiva máxima de desempleo. En el caso de personas o familias sin hijos, 1.153,33 euros mensuales, en el caso de familias con un hijo, 1.318,10 euros y en el caso de familias con dos o más hijos, 1.482,86 euros. De igual modo, cuando el valor de las propiedades inmobiliarias de todos los miembros de la familia no supere los 300.000 euros.

La primera convocatoria, realizada en 2020 tampoco cosechó el fruto apetecido, dado que solo fueron beneficiarios de las ayudas un total de 236 salmantinos. En aquella ocasión la partida asignada ascendía a un millón de euros y, de ellos, solo se gastaron 626.000 euros en diuchas ayudas económicas.