J.M.A. / ICAL



El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, aseguró este martes en Salamanca que los 5.000 millones de euros que Castilla y León aspira a recibir de los fondos europeos Next Generation serán destinados a “digitalización y economía circular”, según las prioridades que marcan los reglamentos de la la propia Unión Europea, y confió en que sirvan para la transformación real de la Comunidad.



Carriedo espera que estas partidas, cuya gestión corresponderá a partes iguales a la Junta y la Administración General del Estado en Castilla y León, sirvan para “una transformación real de este tierra”, sumados al aprovechamiento del "presupuesto que recién ha comenzado”. El consejero realizó estas consideraciones durante su intervención en un foro económico, donde desgranó los puntos fundamentales de una “triple crisis: la sanitaria, la social y la económica".



“Estamos haciendo frente a esas tres crisis a la vez mediante el impulso de la vacunación, procurando que el nivel de paro de Castilla y León esté entre los más bajos del conjunto de España y consiguiendo que esa recesión sea menos intensa en este territorio”, matizó el consejero. A este objetivo vienen a sumar los fondos Next Generation de la Unión Europea. “Nos gustaría que sirvieran para inversiones de modernización y de transformación de esta tierra y que nos hicieran así más competitivos para que las oportunidades que hoy tenemos, que no son pocas pero no están exentas de dificultades y riesgos, las podamos aprovechar”, valoró. 



Impuesto de sucesiones y donaciones



Por otro lado, el consejero de Economía y Hacienda recordó que en el pleno que arranca este martes se aprobará la propuesta del Ejecutivo de retirar el impuesto de sucesiones y donaciones en Castilla y León. “Es de los plenos más importantes de la Legislatura. Es un hecho ciertamente relevante que nos va a permitir facilitar la dinamización del empleo, el ahorro y el crecimiento de la demanda interna. Esto generará nuevas oportunidades en nuestra tierra, en la medida en que bajar impuestos siempre genera la estabilidad y confianza necesarias para favorecer las inversiones en este contexto”, resumió Carriedo. 



En este sentido, ejemplificó con supuestos concretos para ilustrar los beneficios de la medida. “Desde una ganadera que a los tres años de heredar un negocio de vacuno lo tiene que cerrar por falta de futuro y, evitando pagar este impuesto, puede crear una segunda oportunidad; hasta una chica joven que accede a su primer empleo y sus padres le donan una pequeña cantidad económica para facilitar la compra de un coche para ir al puesto de trabajo; o el pequeño autónomo que, como consecuencia de la pandemia lo está pasando muy mal, al que sus padres ayudan para pedir un crédito y salvar la empresa”, supuso. 



En conclusión, Carriedo señaló que “que estas cantidades no estén gravadas es muy importante desde el punto de vista de salvar empleos, negocios, crear oportunidades y que Castila y León sea una tierra que reúna las condiciones para favorecer la atracción de empleo”.