Se ha anunciado, se ha pedido responsabilidad y se han ampliado los controles policiales para que no ocurra, pero la Semana Santa ya está aquí y puede que algunos se lo tomen como una invitación a pasar unos días fuera de casa. 

La relajación de la pandemia tras tres semanas de confinamiento van dando sus frutos, como reflejan los datos poco a poco, pero ello no admite nada de relajamiento, menos aún para expandir el virus a lugares donde pueden vivir más tranquilos como en muchas zonas de la provincia de Salamanca, como muestran los datos de la Junta. 

Por ello, desde las diferentes localidades de Salamanca viven con atención estos días para que ningún forastero 'se cuele' en su propiedad como, según ha denunciado la propia consejera de Sanidad, Verónica Casado, ocurrió en la semana anterior al estado de alarma. 

No en vano, los datos de pacientes desplazados de otros lugares a la provincia de Salamanca y que han pedido el traslado de la tarjeta sanitaria son más de 700 personas, de la que la mitad llega desde la Comunidad de Madrid. 

Evidentemente, estos datos podrían ser mayores, ya que en algún caso el traslado se habría producido sin la petición de la tarjeta sanitaria.

Así, con estos datos y, después de ver imágenes de las salidas de Madrid, con atascos, se vuelve a llamar a la responsabilidad para no salir de las ciudades aunque, se recuerda, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se mantiene expectante con controles continuos para evitarlo.