La Guardia Civil de Burgos ha identificado e investigado a dos ganaderos por matar a un perro a bastonazos después de que salieran en defensa de su rebaño de ovejas que estaba siendo atacado por los canes que integraban una rehala participante en una cacería.

Todo sucedió el pasado mes de febrero, cuando A.D.B, de 63 años, y JJ.D.B, de 58, vieron como varios perros de una rehala que participaban en una cacería atacaron a su rebaño ovino. A raíz de las mordeduras, resultaron heridas dos ovejas, aunque dos acabaron fallecieron, y otras cinco desaparecieron.

Ambos responsables de la explotación ganadera, que estaban en el paraje donde sucedieron los hechos, salieron en defensa de su rebaño, repeliendo el ataque, supuestamente a bastonazos, y acabando con la vida de uno de los perros.

El propietario del animal recuperó el cuerpo y presentó un informe veterinario que avalaba el fallecimiento del perro, donde se señalaba que había sufrido fractura de cráneo a consecuencia de algún objeto contundente.

Recibida la denuncia, el Seprona de la Comandancia de Burgos inició una investigación para esclarecer los hechos, dando como resultado la investigación de estos ganaderos como supuestos autores de un delito de maltrato animal con resultado de muerte.

En la intervención, los agentes han intervenido dos varas de madera, tipo bastón, con las que presuntamente golpearon al animal hasta provocar su muerte. Las diligencias han sido instruidas y entregadas en el Juzgado de Instrucción de Lerma.