La provincia de Burgos lidera el ranking de Castilla y León de brecha salarial entre hombres y mujeres con un 28,97 por ciento, 4,9 puntos por encima de la media nacional, según ha puesto de manifiesto la secretaria regional de Mujer y Políticas de Igualdad de CCOO, Yolanda Martín, durante una jornada sindical desarrollada en la capital burgalesa.
La jornada, bajo el lema 'Brecha salarial de género', se ha desarrollado en el edificio de sindicatos de la calle San Pablo y ha contado también con la intervención de la secretaria confederal de Mujeres e Igualdad de CCOO, Elena Blasco, y su homóloga en la provincia, María del Carmen Noceda.
Según los últimos datos publicados por la Agencia Tributaria, Burgos se sitúa como la provincia de Castilla y León con una mayor brecha salarial entre hombres y mujeres con un 28,97 por ciento, por delante de Valladolid, que registra un 24,07 por ciento, y a 13,33 puntos de Soria que, con un 15,64 por ciento, es la provincia que menos brecha registra en la Comunidad.
Yolanda Martín ha achacado estas cifras al nivel de industrialización de las provincias y ha explicado que las mujeres con edades comprendidas entre los 35 y 44 años son las que registran una mayor diferencia en sus sueldos, respecto a los de los hombres de las mismas edades.
Martín ha destacado, además, que el 18,64 por ciento de las mujeres cobra un sueldo igual o inferior al salario mínimo interprofesional, frente al 7,83 por ciento de los hombres, y, en el lado opuesto, se encuentra el 4,18 por ciento de las mujeres que cobra al menos cinco veces este porcentaje, frente al 7,98 por ciento de los hombres.
Por sectores, la brecha salarial más alta se registra en el de los servicios, que alcanza el 23,3 por ciento, seguido del ámbito industrial, donde la brecha se fija en torno al 19 por ciento, según los últimos datos publicados.
La secretaria confederal de Mujeres e Igualdad de CCOO, Elena Blasco, ha aprovechado su presencia en Burgos para advertir de que, con estas cifras, se da la circunstancia de que las mujeres cobran cobran en España unos 6.000 euros menos anuales por realizar el mismo trabajo que los hombres.
Una circunstancia a la que hay que sumar, según ha dicho, otras "penalizaciones de género", como la infravaloración laboral, la falta de promoción o peores prestaciones sociales y pensiones más bajas.