Quizás esta situación sea reconocible por muchos padres en Castilla y León. Cada vez más familias se encuentran con un obstáculo inesperado al intentar escolarizar a sus hijos pequeños: la imposibilidad de que los hermanos estudien en el mismo centro.
A pesar de que muchos colegios imparten ya todas las etapas de Infantil, la normativa específica que regula el acceso al primer ciclo, de 0 a 3 años no reconoce como criterio la presencia de hermanos mayores en el mismo centro.
El resultado es una realidad que desespera a numerosos padres, que si ya de por sí es complicada la conciliación, aún más cuando tienes que llevar a un hijo a un centro y a otro, a otro.
"Es imposible conciliar", es la frase que más se repite entre los padres cuando ven que tienen que hacer malabares para llevar al bebé a un centro y a su hermano a otro.
Se están dando casos de bebés admitidos en una escuela distinta a la de sus hermanos, rutas diarias duplicadas, horarios incompatibles y una conciliación familiar que se vuelve prácticamente imposible.
"Es un criterio sin sentido, que lejos de facilitar la conciliación de las familias, nos complica el día a día y nos genera un perjuicio importante. Más allá de suponernos un gasto de transporte y tiempo muy valioso, lo cual es prioritario en nuestras vidas, también repercute negativamente en la movilidad de la ciudad, ya que realizamos recorridos que deberían ser innecesarios", explica a EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León una de las madres que se ve afectada por esta medida.
"Del mismo modo que se dan puntos por cercanía al centro o por ser antiguo alumno, debería primar por encima de todo la conciliación que tanto se proclama desde las instituciones y que a la hora de la verdad no se materializa" argumenta.
Este problema, convertido en motivo frecuente de queja, ha llevado al Procurador del Común a alzar la voz y a exigir una reforma del sistema de admisión que ponga fin a esta fractura educativa y atienda las necesidades reales de las familias.
El Procurador del Común de Castilla y León ha emitido una resolución en la que solicita a la Consejería de Educación que estudie la unificación de los procedimientos de admisión del alumnado en los centros sostenidos con fondos públicos, de cara al curso 2026/2027.
La propuesta busca eliminar el régimen específico que actualmente se aplica al primer ciclo de educación infantil, con el fin de favorecer la continuidad educativa y priorizar la escolarización conjunta de hermanos.
El expediente se originó a raíz de las quejas de numerosas familias que no pudieron escolarizar a sus hijos menores en el mismo centro donde ya asistían sus hermanos de mayor edad.
La normativa vigente, contenida en la Orden EDU/95/2022 y modificada por la Orden EDU/117/2023, establece un baremo propio para el primer ciclo de Infantil que no contempla la existencia de hermanos en el centro salvo que también cursen ese mismo ciclo, lo que ha generado situaciones de separación familiar.
Respuesta de la Junta
En un informe con fecha del 23 de octubre de 2025, la Consejería de Educación defendió la independencia normativa del primer ciclo respecto al resto de enseñanzas, argumentando que históricamente este tramo educativo ha funcionado mediante cuotas aportadas por las familias, a diferencia del segundo ciclo de Infantil y etapas posteriores, sostenidas con fondos públicos.
Por ello, sostiene Educación, vincular ambos procesos de admisión podría vulnerar el principio de igualdad de oportunidades.
No obstante, el Procurador del Común recuerda que, con la reciente implantación de la gratuidad del primer ciclo, han cambiado las condiciones que motivaron dicha separación.
Asimismo, la institución subraya la importancia de favorecer la conciliación personal, familiar y laboral, especialmente cuando los menores son de muy corta edad, tal como establece la Ley 11/2007 de Apoyo a las Familias de Castilla y León.
En su resolución, el Procurador considera “razonable y oportuno” avanzar hacia un sistema único de admisión, que garantice la permanencia de los niños en un mismo centro al finalizar el primer ciclo y que permita aplicar sin excepciones el criterio prioritario de escolarización de hermanos.
Esta misma recomendación ya había sido formulada por el Defensor del Pueblo en 2023, sin que entonces fuera aceptada por la Administración autonómica.
La Consejería de Educación ha comunicado que actualmente se encuentra planificando los procedimientos de admisión y que estudiará la propuesta de unificación, comprometiéndose a determinar la opción “más adecuada para el alumnado y las familias”, en un equilibrio entre igualdad de trato y libre elección de centro.
El Procurador del Común ha solicitado a la Consejería una respuesta motivada en un plazo máximo de dos meses.
