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Comienza la cuenta atrás para las próximas elecciones autonómicas en Castilla y León. El desliz del secretario autonómico del PP de Castilla y León, Francisco Vázquez, al anunciar el pasado martes que la fecha de los comicios será el 15 de marzo de 2026, ha obligado a los partidos a activar su maquinaria y a comenzar a fijar sus estrategias con la vista puesta en la jornada electoral.

La historia se repite y las elecciones autonómicas que tendrán lugar dentro de menos de seis meses, como ya sucediese con los anteriores comicios del 13 de febrero de 2022, centrarán todas las miradas a nivel nacional y se convertirán en el primer examen del nuevo ciclo electoral.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, medirán sus fuerzas en la Comunidad, un histórico feudo de los populares, en el que gobiernan de forma ininterrumpida desde 1987, pero donde los socialistas aspiran a que el desgaste del Ejecutivo autonómico tras la crisis de los incendios les permita aspirar a gobernar 38 años después.

Por su parte, Vox tiene el objetivo de rentabilizar el auge del partido en las encuestas a nivel nacional y de atraer a los votantes conservadores descontentos con la gestión de Mañueco, al que acusan de haber girado a la izquierda desde que gobierna en solitario.

El PP insiste en la idea de una supuesta pinza entre PSOE y Vox contra ellos y en presumir de legado de gestión y de un Gobierno "útil y eficaz", frente a la "inestabilidad" del Ejecutivo de Sánchez, y el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, saca pecho de medidas económicas y ayudas a los afectados para tratar de disipar las críticas a su gestión de los fuegos.

Los partidos provinciales creen que las consecuencias de los incendios les han dado la razón y les reforzarán, la izquierda alternativa se reorganiza y Podemos y Sumar tratan de enterrar el hacha de guerra para contribuir al cambio, y el PSOE comienza a hacer desfilar a sus ministros en Castilla y León mientras el aroma electoral se deja sentir cada vez más en el ambiente.

Mañueco y el legado

Los principales partidos políticos de la Comunidad se preparan con sus mejores armas para la batalla electoral de marzo de 2026. El PP cuenta con la ventaja de ostentar el Gobierno en solitario desde julio de 2024 y de poder presumir de legado de gestión para pedir a los votantes que sigan apostando por el modelo de "estabilidad" que, a su juicio, ejemplifican.

Por ello, Mañueco lleva desde principios de este 2025, y especialmente desde que se celebró el debate del Estado de la Comunidad, el pasado mes de marzo, realizando anuncios de medidas con un evidente sonido a urnas.

En aquel debate en las Cortes, el jefe del Ejecutivo autonómico se comprometió a impulsar, durante los últimos meses de la legislatura, una serie de iniciativas para mejorar la vida de los ciudadanos de la Comunidad con las que poner el broche de oro a estos últimos cuatro años de gestión y promovió la mayor parte de las mismas.

En su intervención ante la Cámara, Mañueco prometió la gratuidad de los buses metropolitanos e interurbanos, el refuerzo sanitario con seis helicópteros y 14 ambulancias más, nuevos acuerdos del Diálogo Social, medidas de atención a las mujeres o diferentes líneas de ayudas para autónomos, familias y comerciantes.

Dicho y hecho. El presidente demostró que no iba de farol e impulsó las principales medidas antes del verano, pero los terribles incendios que asolaron Castilla y León durante el mes de agosto, quemando más de 180.000 hectáreas y acabando con tres vidas humanas, truncaron la estrategia de Mañueco, que aspiraba a llegar con placidez a las elecciones aspirando a la mayoría absoluta.

Una cuestionada gestión

La cuestionada gestión por parte del Gobierno del PP en minoría de los fuegos ha puesto en riesgo las expectativas del presidente de la Junta de acercarse a los 41 procuradores que le darían la mayoría para gobernar en los próximos comicios del 15 de marzo de 2026.

Una situación especialmente complicada para los populares debido al hecho de que el controvertido consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, preside la gestora del PP de León, la provincia más afectada por los fuegos, desde que su expresidenta Ester Muñoz pasó a ser portavoz del PP en el Congreso de los Diputados.

La provincia de León es la segunda que más escaños reparte a las Cortes de Castilla y León, con 13 representantes en total, superada solo por Valladolid, con 15. En las últimas elecciones autonómicas, en febrero de 2022, el PP obtuvo cuatro procuradores en ese territorio, al igual que el PSOE, mientras que la Unión del Pueblo Leonés (UPL) logró tres y Vox irrumpió con dos.

El descontento con la gestión autonómica de los fuegos en la provincia de León en la que fallecieron los voluntarios Abel Ramos y Jaime Aparicio y el bombero Nacho Rumbao−, junto al hecho de que la cara visible del PP de León en la actualidad sea el cuestionado Suárez-Quiñones, podría favorecer un retroceso de la representación de los populares en ese territorio.

El PP promueve la reconstrucción

Pero Mañueco ha movido ficha y el Gobierno de la Junta ha mostrado su clara intención de ponerse al frente de la reconstrucción tras los terribles incendios, promoviendo ayudas millonarias para los afectados por el fuego y tratando de trasladar la idea de que el Ejecutivo del PP "no deja a nadie solo".

Además, el hecho de que el presidente de la Junta tenga la intención de estirar lo máximo posible la legislatura, ya que la última fecha legal para celebrar los comicios es ese domingo 15 de marzo, deja entrever que Mañueco tiene intención de que la jornada electoral se celebre con la mayor distancia temporal con respecto a los incendios y que las críticas a su gestión se difuminen.

Este mismo jueves, el portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, informó, tras la reunión del Consejo de Gobierno, del avance en la ejecución de las medidas destinadas a la recuperación de las zonas afectadas por los incendios y destacó que, a cuatro semanas de la puesta en marcha del plan, 36 de las 47 medidas contempladas se encuentran ya ejecutadas.

El Gobierno de Mañueco ha autorizado también 456.500 euros para 83 nuevos agricultores y ganaderos profesionales afectados y, en total, 613 profesionales del campo son beneficiarios de la ayuda mínima de 5.500 euros, con una inversión total de 3.371.500 euros.

Además, la Dirección de Administración Local ha enviado 267 cartas y correos electrónicos a ayuntamientos, pedanías y localidades afectadas, contactando por vía telefónica con todos ellos para informar sobre ayudas y guiar en las solicitudes por daños en las infraestructuras municipales.

Este mismo jueves, el Consejo de Gobierno aprobaba el cuarto bloque de ayudas que suma 56 nuevas solicitudes por valor de 308.000 euros destinados a autónomos y pymes cuya actividad se vio interrumpida. Mañueco trata de tomar la delantera en el inicio de esta cuenta atrás electoral liderando la reconstrucción y tratando de dejar atrás este tormentoso verano.

La alternativa del PSOE

El PSOE afronta la carrera hacia las elecciones con la clara intención de recuperar el Gobierno de la Junta después de 38 años. Los socialistas tratarán de ofrecer a los ciudadanos la idea de que un cambio a mejor es posible en la Comunidad, después de casi 40 años de supuesta "desidia" por parte de los populares, y de que Carlos Martínez es el hombre indicado para encabezarlo.

El alcalde de Soria, secretario general del PSOECyL desde el pasado mes de enero, está tratando de lograr una presencia de la que ha carecido en muchos momentos, al no ser procurador en las Cortes y haber tenido la ocasión de protagonizar debates parlamentarios con Mañueco, y en las últimas semanas se ha mostrado cada vez más convencido de poder lograr su objetivo.

Los socialistas, además, tendrán que consagrar como candidato a Martínez, aún no proclamado oficialmente, en unas primarias a las que se presentará oficialmente como candidato este sábado, en una intervención ante el Comité Autonómico del partido. Se da por hecho que será el elegido pero el propio Martínez ha pedido "no adelantar acontecimientos" por si alguien más se presentase.

El plazo de la presentación de candidaturas a esas primarias se abre este sábado y existe un plazo de presentación de avales de 72 horas, aunque no se prevé que el secretario general del PSOECyL tenga rival a la hora de convertirse en el aspirante a desbancar a Mañueco como presidente de la Junta.

Los socialistas han tratado de capitalizar las críticas a la gestión de los incendios por parte de la Junta, vinculando las devastadoras consecuencias de los fuegos a las políticas del PP durante sus 38 años de Gobierno en la Comunidad y a la "privatización", el "abandono" y la "falta de medios" del operativo contra incendios.

Antes de la crisis de los incendios, las perspectivas electorales de los socialistas no eran demasiado halagüeñas y las encuestas vaticinaban un retroceso en su número de procuradores pasando de los 28 actuales, que ya supusieron una decepción en 2022, a unos 24-25 representantes, del todo insuficientes para optar a recuperar el bastón de mando de la Junta 38 años después.

Pero la cuestionada gestión de los incendios de Mañueco ha permitido al PSOECyL recuperar protagonismo, encabezar la petición de dimisión del presidente de la Junta a la que se ha sumado toda la oposición menos Vox y tratar de situarse como punta de lanza de la defensa de los derechos laborales de los bomberos forestales.

Los socialistas lograron apuntarse el tanto de haber sido ellos los impulsores de la reprobación de Quiñones y protagonizaron un auténtico asedio de preguntas parlamentarias al consejero insistiéndole una y otra vez en que dimitiese y pidiera "perdón" por su gestión.

Además, la portavoz socialista en las Cortes, Patricia Gómez Urbán, fue directa exigiendo también a Mañueco que dejase el cargo y "diese la voz a los ciudadanos" tras la "incompetencia" demostrada, a su juicio, por el presidente de la Junta durante la gestión de los incendios de este verano.

El PSOECyL, que carece de la ventaja con la que cuenta el PP al ostentar el Gobierno autonómico a la hora de presumir de legado, hará bandera, en cambio, de las medidas del Ejecutivo de Sánchez en la Comunidad para demostrar que "se puede gobernar de otra manera".

Ante la cercanía de las elecciones, los desfiles de ministros por tierras castellanas y leonesas ya han comenzado y este mismo viernes la titular de Vivienda, Isabel Rodríguez acompañada por los vallisoletanos ministros de Transportes, Óscar Puente, y de Igualdad, Ana Redondo− anunció la construcción de 200 viviendas públicas asequibles en la ciudad de Valladolid.

Rodríguez, que presumió de las acciones del Gobierno en materia de vivienda y apostó por el intervencionismo, aprovechó para lanzar un dardo al Ejecutivo de Mañueco y exigirle que contribuya al Plan Estatal de Vivienda, criticando, además, su negativa a señalar las zonas tensionadas. Un aperitivo del choque entre ejecutivos que se avecina ante la proximidad de los comicios.

La oportunidad de Vox

Vox afronta con optimismo la carrera electoral hacia las elecciones del próximo 15 de marzo de 2026. La formación vive un momento dulce a nivel nacional, con todas las encuestas a su favor, pronosticando una subida del partido desde los 33 diputados actuales a entre 50 y 60 representantes en el Congreso de los Diputados, con un PP cada vez más estancado.

Esa situación, unida a la crisis de los populares tras su cuestionada gestión de los incendios, ha dado esperanzas al partido de Santiago Abascal de mantener, o incluso mejorar, los resultados de los últimos comicios, cuando consiguieron 13 procuradores en las Cortes y fueron determinantes para la conformación del Ejecutivo autonómico, entrando por primera vez en un Gobierno en España.

El partido tiene clara su estrategia: apuntar contra el bipartidismo y las políticas de PP y PSOE que, a su juicio, han sido un "lastre" para España durante más de 40 años y, en el caso concreto de la Comunidad, criticar la que a su juicio ha sido una deriva "izquierdista" de Mañueco, que ha rectificado gran parte de las medidas impulsadas por Vox cuando formó parte del Gobierno de coalición.

Con todo, el partido cuenta, por ahora, con el hándicap de no contar aún con candidato para los comicios y ya ha anticipado que no elegirá a su cabeza de lista hasta que se convoquen oficialmente las elecciones, previsiblemente a finales del mes de enero de 2025.

En todas las quinielas suena el presidente de las Cortes, Carlos Pollán, aunque no se descarta tampoco a su combativo portavoz en la Cámara, David Hierro, ni la posibilidad de que la formación opte por una figura desconocida, como cuando eligió a Juan García-Gallardo en los anteriores comicios, obteniendo un gran resultado en la Comunidad.

Además, es previsible una dura pugna en campaña entre PP y Vox. La traumática salida de los de Abascal del Gobierno autonómico, y los sucesivos enfrentamientos protagonizados con los populares en las Cortes, han dinamitado la relación entre los exsocios y Castilla y León se ha convertido en la comunidad de España donde ambos partidos mantienen mayores fricciones.

Buena prueba de ello es que, mientras en territorios como la Comunidad Valenciana, Baleares o Murcia los populares y Vox pactaban los presupuestos, en Castilla y León el partido de David Hierro ni siquiera se presentaba a la negociación presupuestaria después de que Mañueco arrugase y tirase sus propuestas al suelo, literalmente, en las Cortes.

Tras el estallido de la crisis de los incendios, con todo, Vox ha optado por un doble juego y ha sido la única formación de la oposición que no ha solicitado la dimisión de Mañueco y Quiñones, pero ha movido ficha para exigir responsabilidades por los fallecimientos en los terribles incendios de este mes de agosto y ha presentado una denuncia por un posible delito de homicidio imprudente.

Además, permitió con su abstención que saliese adelante la reprobación de Quiñones en las Cortes pero, a su vez, tumbó la comisión de investigación sobre los incendios solicitada por el Grupo Mixto y UPL-Soria ¡Ya!.

Vox, como destino natural del votante conservador descontento con el PP, podría verse beneficiado del desgaste de Mañueco y atraer un porcentaje nada desdeñable de exvotantes populares, pero sus recientes votaciones conjuntas con el PSOE podrían penalizarlo.

El PP ha hecho bandera durante los últimos meses del término 'Partido Voxcialista' haciendo referencia a una supuesta unión entre PSOE y Vox, especialmente después de la aprobación de la polémica Ley de Publicidad Institucional el pasado mes de junio con el apoyo de toda la oposición, la primera en salir adelante en la Comunidad sin el apoyo de los populares desde 1988.

Pero la formación de Abascal se ha centrado en presentarse como la única alternativa frente a PP y PSOE, el viento nacional sopla a su favor, especialmente en lo que se refiere a su discurso migratorio, y esa situación, unida a un hipotético desgaste de Mañueco, podría permitir al partido mantener e incluso aumentar su representación en las Cortes el próximo 15 de marzo de 2026.

La izquierda y los provinciales

La izquierda alternativa afronta la carrera electoral con muchas incógnitas y es que aún no se conoce siquiera si Podemos, Izquierda Unida y Movimiento Sumar acudirán unidos o por separado a los comicios del próximo mes de marzo.

El nuevo coordinador general de Podemos en la Comunidad, Miguel Ángel Llamas, se ha mostrado abierto a una coalición pero ha asegurado que el partido está listo para ir en solitario mientras el procurador de Unidas Podemos, Pablo Fernández, ya de retirada de la Cámara autonómica, aseguró que su partido tratará de conformar una candidatura "amplia y plural".

En el mismo sentido, el líder de Izquierda Unida en la Comunidad, Juan Gascón, y la coordinadora de Movimiento Sumar, Marina Fernández, han apostado por una confluencia de las izquierdas con el objetivo de contribuir a desbancar a Mañueco del Gobierno. Del tipo de candidatura que configuren finalmente y de quién sea su candidato dependerán en gran medida sus posibilidades.

Por su parte, la Unión del Pueblo Leonés (UPL) tratará de capitalizar el descontento con la gestión de los incendios de la Junta en la provincia de León, la más afectada por los fuegos de este verano, para aspirar a ganar por primera vez en la provincia, y Soria ¡Ya! también hará hincapié en un supuesto abandono a los territorios despoblados para mantener su representación.

Por Ávila aspirará a mantener el procurador con el que cuenta desde 2019 reivindicando las prioridades de la provincia abulense y el espacio del centro liberal perderá su representación en la Cámara con la salida del siempre polémico Francisco Igea, que obtuvo su acta de procurador por Ciudadanos en 2022, fue expulsado del partido posteriormente y no se volverá a presentar.

Un examen nacional

Las elecciones del 15 de marzo de 2026 serán también el primer examen del nuevo curso político para Feijóo y Sánchez. El líder del PP tiene presente el mal recuerdo del duro golpe que supuso para su predecesor al frente del partido, Pablo Casado, el pobre resultado de Mañueco en febrero de 2022, y quiere evitar que la historia se repita.

Los populares van a poner toda la carne en el asador para apoyar al presidente de la Junta y auparlo para que se acerque lo máximo posible a la mayoría absoluta, con el ejemplo del presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno, que podría optar por adelantar las elecciones, previstas para junio, para hacerlas coincidir con las de la Comunidad y lograr un efecto contagio en Castilla y León.

Es previsible que los dirigentes populares se vuelquen en la campaña electoral en uno de sus feudos históricos, que quieren mantener atado, para lograr una victoria amplia que refuerce al líder del PP de cara a las andaluzas, si se celebran por separado, a las municipales y autonómicas de mayo de 2027 y, finalmente, a las generales, para lograr desalojar a Sánchez de la Moncloa.

Para el presidente del Gobierno, las elecciones de Castilla y León también son muy relevantes. Sánchez ve en la cuestionada gestión de los recientes incendios por parte del PP en la Comunidad una oportunidad inédita de asaltar un bastión popular que, hasta ahora, parecía inexpugnable y confía en las opciones del incombustible alcalde de Soria de lograr ese hito histórico.

El PSOE también tiene intención de sacar a toda la artillería para apoyar a Martínez, como han demostrado los desfiles de ministros durante la última semana, que se repetirán, previsiblemente, durante los próximos meses, y los socialistas aspiran a acabar con 38 años de Gobierno del PP en la Comunidad y a recuperar Andalucía como paso previo para mantener la Presidencia en 2027.

Las elecciones se convocarán, previsiblemente, en torno al 20 de enero, 54 días antes de los comicios, y la campaña electoral comenzará oficialmente el 28 de febrero, 15 días antes, pero la cuenta atrás ya ha empezado y los partidos se han puesto alerta y en marcha para emprender la larga carrera hacia una cita electoral que volverá a concentrar todas las miradas en Castilla y León.

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