Castilla y León está viviendo un verano con cielos inestables. Las tormentas no se alejan de la Comunidad y son muchos los ciudadanos que se ven sorprendidos por una fuerte tromba de agua después de un caluroso día.
Lo cierto es que, lejos de que la situación mejore, según han avanzado desde Meteored se espera que una dana cruce España a partir del jueves dejando tormentas con granizo y vendavales.
Durante la primera parte de la semana, la situación meteorológica estará caracterizada por un breve alivio térmico en la mitad septentrional peninsular a causa de la llegada de una masa de aire polar marítimo con vientos del norte-noroeste.
En capitales como Burgos, los más madrugadores deberán llevar una chaqueta. Los expertos alertan de que habrá que prestar atención a lo que llegará desde el Atlántico en la recta final de la semana.
Según su modelo de referencia, una dana cruzará la Península los días 11 y 13 de junio, y si se acaba cumpliendo este escenario, dará lugar a un importante episodio de tormentas fuertes y organizadas con fenómenos adversos como granizo de gran tamaño y vendavales.
La inestabilidad más acusada se irá desplazando en función del movimiento del descuelgue de aire frío. De esta manera, los mapas muestran que el viernes crecerán chubascos y tormentas en la Cordillera Cantábrica, interior de Galicia, Sistema Ibérico, Aragón y Cataluña.
Las temperaturas prácticamente no superarán los 30 grados en dos provincias durante las horas centrales del día, Salamanca y Zamora, que llegarán a los 31, mientras que en el resto estarán entre los 25 de León y los 30 de Segovia y Ávila.
Mañana martes continuará la bajada por el tercio norte mientras que las temperaturas nocturnas serán frescas para la época en Castilla y León y se quedarán entre 10 y 13 ºC.