La ola de frío ha llegado con fuerza a Zamora, y tras la cencellada de ayer que dejó imágenes espectaculares, por segundo día consecutivo la fuente de la Marina parece más una pista de hielo que parte del mobiliario ornamental de la ciudad.

La fuente ha amanecido totalmente congelada debido a las bajas temperaturas que continúan acuciando a la ciudad, en la que ya comienza a ser normal ver los termómetros en negativo.