Desde el 1 de enero de 2024 los alumnos que realizan prácticas formativas no remuneradas están incluidos en el sistema de la Seguridad Social. Hasta este momento, solo estaban incluidos en el sistema quienes realizaban prácticas remuneradas.
Esta medida ha permitido que, desde su entrada en vigor hasta el 30 de junio de 2025, un total de 68.618 alumnos de Castilla y León hayan sido dados de alta y, por tanto, hayan cotizado, al menos, un día en la Seguridad Social.
Según los datos que arroja el Ministerio de Inclusión y recoge este periódico, en España un total de 1.580.637 alumnos se han encontrado en esta situación en las fechas señaladas.
No obstante, con esta ampliación, se ha equiparado la protección de todos los alumnos de prácticas formativas, ya fuesen remuneradas, o no.
La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, pone en valor que “las medidas que se han aprobado protegen de una forma más efectiva a los estudiantes al reconocerles sus derechos desde que inician sus carreras de cotización con las prácticas formativas”.
En la actualidad, los alumnos que están incluidos son prácticas realizadas por alumnos universitarios, ya sea para obtener una titulación oficial (grado, máster o doctorado) o para un título propio de la universidad.
Prácticas realizadas por alumnos de formación profesional, cuando no se presten en régimen de formación profesional intensiva, de carácter no laboral.
Y prácticas realizadas en enseñanzas artísticas superiores, enseñanzas artísticas profesionales y enseñanzas deportivas del sistema educativo.