Castilla y León alcanzó un déficit de 69 millones de euros en junio de 2022, una cantidad que equivale al 0,11% de su PIB y que supone un descenso del 67,7% con respecto al mes de junio de 2021, cuando el déficit era de 214 millones de euros, un 0,36% del PIB.
Las comunidades autónomas presentaron en la primera mitad de 2022 un déficit total de 8.168 millones, lo que supone un 0,62% del PIB, frente al 64% de hace un año (7.714 millones).
Por su parte, el déficit conjunto de la Administración Central, los Fondos de la Seguridad Social y las Comunidades Autónomas, excluida la ayuda financiera, se sitúa en 29.248 millones, equivalente al 2,24% del PIB. Si se incluye el saldo de la ayuda a las instituciones financieras, por importe de 395 millones, el déficit se sitúa en el 2,27% del PIB.
El déficit de la Administración Central se situó en 21.993 millones a finales de junio, lo que corresponde al 1,68% del la economía generada en el conjunto del país. El déficit del Estado en mayo en términos de PIB equivale al 1,84%, lo que supone 20.056 millones, casi un 40% menos que al registrado en mayo de 2021, según informó en un comunicado remitido a Ical el Ministerio de Hacienda y Función Pública.
Los recursos no financieros se sitúan en 148.415 millones, lo que implica un 32,5% más respecto al mismo periodo de 2021. Los impuestos alcanzan los 115.336 millones, el 77,7% del total de los recursos, y crecen un 23,2% respecto a julio de 2022.
Los impuestos sobre la producción y las importaciones aumentan cacsi un 16%. En concreto, los ingresos por IVA se elevan un 19,7%. Los impuestos corrientes sobre la renta y el patrimonio crecen un 35,4% debido al IRPF, que rozaron el 45% sobre todo por el ingreso del primer plazo de la declaración de la renta.
Por su parte, el Impuesto sobre la Renta de No Residentes se eleva un 67,5%. Los ingresos del Impuesto sobre Sociedades crecen un 25,2% si se deduce el ingreso extraordinario derivado de la fusión de dos grandes entidades que se recogió en 2021.
Asimismo, los impuestos sobre el capital aumentan 134 millones de euros respecto al mismo periodo del año anterior y los ingresos de las cotizaciones sociales descienden en un 3,6%.
Por su parte, las rentas de la propiedad disminuyen un 4,4% respecto a 2021 debido a los menores ingresos por intereses, que disminuyen un 20% hasta 994 millones. No obstante, esta disminución se compensa, en parte, con el aumento de los ingresos por dividendos y otras rentas de la propiedad en un 5,7% hasta los 2.006 millones.