Plena Semana Santa. Plena campaña electoral. Salamanca vive un respetuoso silencio procesional y capea el ruido político. Es tiempo de pasión, por las marchas y las urnas, pero sobre todo, este sábado es tiempo de pasión por el fútbol. Vuelve el derbi. Regresa a la capital del Tormes un viejo 'amor' que ha engendrado un nuevo 'odio'. Y a veces mal entendido. Salamanca CF UDS y Unionistas de Salamanca se enfrentan a partir de las 20:45 horas en el estadio Helmántico.

Será la cuarta vez que se enfrenten, la segunda esta temporada y la segunda en el coliseo charro. ¿Los precedentes? Favorables a los locales. En el partido de ida la partida acabó en tablas, aunque la pasada temporada el entonces Salmantino se llevó los dos choques. Y los dos gracias al mismo hombre, un Martín Galván que es duda hasta última hora para su entrenador Antonio Calderón. A buen seguro la afición local querrá que sea de la partida.

Quienes seguro no lo serán son José García, Toño, Manu Molina y Owusu. El delantero ganhés, alfa y omega del ataque del Salamanca UDS, se borró de la disciplina del club y tardó en dar señales de vida. Tal vez no vuelva a ponerse la camiseta blanca. Eso sí, Calderón podría hacer debutar a los nuevos fichajes Torres y Enríquez. Veremos. En el bando visitante, Roberto Aguirre recupera una de sus piezas claves en el centro del campo, el todoterreno Ribelles, que podría ser de la partida. Sin embargo, pierde a Unai y tampoco podrá contar con Juanmi y Guille Andrés.

El Salamanca UDS llega al derbi con 38 puntos, tres más que el puesto de playout que ocupa Las Palmas Atlético, aunque cuanta con ventaja de cinco sobre el descenso que marca el Unión Adarve. Los de Calderón suman tres partidos sin ganar desde que lo hicieran en una gran tarde ante el Pontevedra. La pasada semana lograron aguantar un meritorio empate en campo del Real Madrid Castilla.

Unionistas llega más desahogado con 44 puntos y en la undécima plaza. Tiene cerca alcanzar el objetivo de la temporada, que no es otro que la permanencia. Son siete puntos sobre el playout y nueve sobre el descenso directo. Eso sí, no se puede dormir en los laureles. Los de Aguirre vienen de sumar un pírrico punto ante el Burgos y de ser zarandeados en El Toralín. La última victoria, también de mérito, ante el poderoso Fuenlabrada en Las Pistas.

Las espadas en todo lo alto para un partido que se espera con gran ambiente en la gradas del Helmántico y que esperamos transcurra con normalidad, toda vez que la previa, como en anteriores ocasiones, ha vivido momentos tensos. Y es que ha habido quien se ha encargado de calentar los prolegómenos. Es la fiesta del fútbol salmantino y, como tal, debe ser fiesta y, sobre todo, debe ser fútbol.