La Coordinadora de Estudiantes de Castilla y León ha exigido la devolución de las cuotas de las residencias de estudiantes cerradas por el COVID-19 y cuya clausura llegó "de manera precipitada y repentina" que obligó a sus ocupantes a abandonar sus residencias "con muy poca antelación".

A través de un comunicado remitido a Europa Press, esta Coordinadora ha reclamado la "inmediata devolución" del pago de las habitaciones, comedores y demás servicios contratados durante el periodo de tiempo en el que se mantengan cerradas las residencias, además de la remuneración de los costes que supuso a los estudiantes desplazarse hasta su lugar de origen tras el cierre de las mismas.

Según afirma, la justificación de estas exigencias se encuentra en que el abandono "fue obligatorio" y por ello, los estudiantes "no deben hacer frente a las consecuencias económicas de una decisión tomada por las autoridades sanitarias".

Asimismo, considera que la medida, adoptada por la Junta de Castilla y León y todas las Universidades públicas de la Comunidad, obliga a éstas a adoptar medidas "para no dejar a ningún estudiante atrás".

De cara al futuro y a una posible ampliación del periodo académico para la realización de actividades que no pueden llevarse a cabo de manera telemática, la Coordinadora apuesta por la puesta a disposición de las residencias públicas para aquellos estudiantes que lo necesiten, de manera gratuita.

"La ampliación del periodo académico no puede suponer un sobrecoste para los estudiantes, muchos de las cuáles no pueden permitirse asumir un mes más de alquiler, especialmente aquellas de extracción popular", subraya el comunicado.

También advierte de que los estudiantes desplazados se encuentran "completamente desamparados" para hacer frente al pago de un alquiler "que resulta inasumible" y por ello ha mostrado su apoyo la huelga de alquileres que exige al Gobierno de España medidas que cubran "los derechos más básicos durante el confinamiento".