El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha anunciado en el Consejo de Dirección del Grupo Parlamentario Popular del Senado que, de salir adelante la ley de condonación de la deuda, estudiará un recurso ante el Tribunal Constitucional (TC).
Mañueco ha calificado la decisión de Sánchez como una "maniobra de trilero". Además de sostener que la medida es "un atraco" a todos los españoles. Posteriormente, enfatizó que se trata de una "tropelía" para aquellos que, según el presidente, han "hecho los deberes".
Con esto, Fernández Mañueco, se une al anuncio de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, quien ayer ya avanzó su intención de recurrir la medida del gobierno ante la justicia en caso de aprobarse como ley.
Según señaló ayer el portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, esta medida supondría un coste a cada castellano y leonés de 1.800 euros de deuda y 523 euros más por persona que antes del acuerdo entre el Gobierno y ERC.
Al respecto de las negociaciones de la futura ley, el presidente de la junta ha querido hacer hincapié en la figura de Oriol Junqueras, del que ha mencionado que quiere que "le quiten la deuda que él mismo generó".
Además, Mañueco aseguró que "en Castilla y León pagamos nuestras deudas y no vamos a pagar los despilfarros independentistas". A su juicio, la jugada de Pedro Sánchez “contenta a sus socios, pero no da solución a los problemas de financiación de las CCAA”.
El presidente de la Junta ha concluido con un claro mensaje: "Tener a los separatistas contentos para que Sánchez se mantenga en el sillón nos costará una millonada".
Ciudadanos de segunda
Por su parte, el portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, durante el Consejo de Gobierno de este jueves ha insistido en la “posición totalmente contraria” a la ley orgánica y ha confirmado que la Junta estará del lado de un posible recurso ante el Tribunal Constitucional.
“Pedimos que lo que a todos nos afecta lo decidamos entre todos. Lo que nos afecta a todo no se tiene que negociar con los partidos separatistas. No es digno que se nos trate como ciudadanos de segunda”, ha afirmado durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.
Además, ha insistido en que no es justo que los “castellanos y leoneses tengan que pagar su deuda y además el referéndum y las embajadas en el exterior”, en alusión al despilfarro que los partidos separatistas han tenido en su gestión en la Generalitat de Cataluña.
Carriedo ha vuelto a cifrar un coste de 1.800 euros y una deuda de 523 euros más que antes del acuerdo entre Gobierno de España y ERC. Son las cifras que previamente habían calculado que tendrá para cada ciudadano de Castilla y León la condonación de 83.000 millones de euros de deuda a las comunidades, según Fernández Carriedo.
El portavoz ha criticado la "mal llamada condonación de la deuda" porque "no se queda sin pagar y tampoco la asume Sánchez".