¡Boom! se ha convertido en el concurso más visto de la televisión. El formato que presenta Juanra Bonet cerró el mes de febrero con cerca de 2 millones de espectadores y el 15,4% de cuota de pantalla, mejorado en más de un punto el mes anterior.

En el presente marzo, el espacio de las tardes de Antena 3 está logrando datos por encima de los dos millones, y la entrega del día 4 congregó a un 16,3% con 2.119.000 espectadores, lo que suponía su segundo mejor dato de la temporada tanto en cuota como en número de espectadores. Aquel día sacó 1,6% de diferencia a Sálvame, su principal competidor.

El éxito, en parte, se lo deben a M.A. de Valencia, Manolo de Jerez, Óscar de Madrid, y Victoria de A Coruña, Los Dispersos, el equipo que ya ha conseguido el título de ser “los nuevos Lobos” con todas las de la ley.

La audiencia ya ha cogido mucho cariño a estos participantes, que cada tarde nos hacen sufrir cuando fallan una o dos preguntas en la prueba final, acariciando una vez más ese bote que ya supera el millón de euros. No obstante, llevan ya más de un centenar de tardes colándose en las casas de los espectadores (aunque están lejos, de momento, de las 500 entregas que aguantaron Los Lobos).

¿Existe la figura del concursante profesional?

En Los Dispersos hay mucho callo televisivo. Se conocen de Saber y Ganar, y también pasaron por El Gran Quiz, de Cuatro, o Pasapalabra, formato en el que Manolo resultó ganador del bote. Y es que parece que, en los últimos años, estamos viviendo cómo un montón de anónimos se convierten en profesionales de la pequeña pantalla, en calidad de concursantes. Yendo de un programa a otro, saltando de cadena en cadena.

Los datos de ¡Boom!, o los antiguos de Pasapalabra hablan por sí solos. A los espectadores les gusta coger de la mano a los participantes y seguir sus andanzas día a día, semana a semana. Los concursantes pasan de programa en programa intentando ganar más dinero mientras demuestran sus conocimientos culturales, y un día están cortando cables, y otros eligiendo la respuesta correcta entre cuatro posibles en El Millonario. Y viceversa, porque ¡Boom!  ha tenido estos días un especial llamado ‘La liga de los millonarios’, que enfrentará a los mejores concursantes del exitoso programa ¿Quién quiere ser millonario?.

Sin olvidarnos de El Cazador. TVE lanzó hace unas semanas un nuevo concurso en el que un grupo de cuatro concursantes se enfrenta a un maestro de los concursos. Erundino Alonso, la cara más conocida de ‘Los Lobos’ (Boom); Ruth de Andrés, ‘magnífica’ del concurso de La 2 Saber y Ganar; y Paz Herrera y Lilit Manukyan, dos de las concursantes más famosas de Pasapalabra, se turnan para convertirse en cazadores, y demostrar que saben más que cuatro cabezas juntas.

El programa ha conseguido levantar un poco las maltrechas audiencias de La 1 en sus tardes, y Erundino y compañía han demostrado que ya saben moverse por la televisión como Pedro por su casa. De hecho, es interesante que hayan cambiado su rol al de sabios con aires villanos, con apodos que intimidan como la gobernanta, el justiciero, la espía y la profesora. Además, tiene gracia esas pullas que lanzan a sus rivales a modo de desafío, todo fruto del guion. A nivel particular, el que aquí escribe siente debilidad por Ruth, la gobernanta, y el respeto que infunde con sus dardos.

Rafa y Orestes en 'Pasapalabra'

Cuando ‘Pasapalabra’ desapareció (pero no sus concursantes)

Dentro de este baile de concursantes, es interesante recordar cómo Telecinco se vio obligado, por orden del Supremo, a cesar sus emisiones de Pasapalabra. El público entonces vivía con ahínco el duelo que cada día enfrentaba a Orestes y Rafa, que nunca llegaron a ganar el bote. Conocedores de que el público quería saber cómo terminaba aquel codo a codo, Mediaset los rescató cuando se sacó de la manga El Tirón, el concurso cultural que forma parte de Sálvame Banana.

En la actualidad, Rafa sigue concursando, aunque Orestes cayó eliminado.  Además, cada tarde,, en plató, como futuros concursantes, solemos ver a otros antiguos ‘pasapalabros’ como Jero, cuya eliminación sentó como un jarro de agua fría a los espectadores, pues Telecinco le dedicó una promo en la que parecía que sería ganador del bote.

Pasapalabra ha dado tanta popularidad a sus concursantes que de vez en cuando ha repescado a los más míticos, con especiales como el de Academia Pasapalabra (que reunió a 16 participantes), o Pasapalabra en familia, que se emitió unos meses en la franja de sobremesa.

A veces, a algunos de los sabios de Pasapalabra los hemos visto en concursos alejados de la cultura general. Tal fue el caso de Paco Benito, ganador del rosco, y que en 2016 probó suerte en Supervivientes. En su juventud había sido jugador de baloncesto, siempre declaró que amaba la aventura y vio interesante saltar al mundo de los realities.

Por desgracia para él, la suerte no estuvo de su lado, fue nominado, y acabó desterrado primero con Yurena y luego con Steisy. Fue el décimo expulsado, tras 68 días en el Caribe. Aquella edición, en la que coincidió con Mila Ximénez o Yola Berrocal, la acabo ganando el modelo extremeño Jorge Díaz.