Después de un 2019 convulso debido a la interinidad organizativa en la que está sumida desde julio de 2018 cuando se designó a Rosa María Mateo como Administradora Única Provisional, RTVE iniciaba 2020 con la necesidad de encontrar su camino para ser fiel reflejo de la sociedad y alcanzar la meta de una radiotelevisión pública de la que la inmensa mayoría pueda sentirse orgullosa. 

Sin embargo, en este complejo proceso, la radiotelevisión pública ya se encuentra ante un gran problema: el desapego que existe entre la población más joven. Y es que, como bien explican a BLUPER el director de Contenidos Digitales de RTVE, Alberto Fernández, y el subdirector de Transmedia y Playz, Agustín Alonso, "hay una audiencia que se va de Clan y ya no crece con TVE. Se está rompiendo el vínculo emocional entre la radiotelevisión pública y los ciudadanos".

Aunque a corto plazo sigas pensando que tienes un share, el envejecimiento de la población te hace perder sentido

"Y eso es un problema muy importante de cara a la supervivencia de la empresa porque, aunque a corto plazo sigas pensando en que tienes un share y que la gente te está viendo, el envejecimiento progresivo de la población hace que tú como empresa vas perdiendo sentido. Nuestra labor es intentar incorporar esa gente a RTVE, pero teniendo en cuenta que ya no puede se les puede incorporar a ver un canal de televisión lineal o ni tan siquiera el consumo de plataforma digital", añaden. 

Eso se está haciendo a través de programas como Operación Triunfo, que está teniendo un sobresaliente seguimiento en redes sociales e internet. No obstante, ambos advierten de que "el problema es que RTVE no tiene presencia. Hay jóvenes que se identifican con OT o con los chicos, pero la lucha es que ese público joven se familiarice con el mundo RTVE". 

"Si tenemos un público joven de 13 a 24 que tiene seguimiento de OT, pero luego no lo complementas con otra oferta que sea reincidente, es complicado que ese público se quede. Una mayor sinergia de OT con Playz sería positivo", añaden refiriéndose al canal digital de contenido digital de la radiotelevisión pública.

Un producto 360

Para ello, "la producción ejecutiva de un producto de TVE también tiene que ser 360. Desde tele hay que asumirse que lo digital no es un complemento, sino que forma parte del ADN. Y si esa parte digital no tiene una asistencia fuerte, se te cae con todo el equipo", explican. 

Desde tele hay que asumirse que lo digital no es un complemento, sino que forma parte del ADN

No obstante, son conscientes de que existe una labor tanto dentro como fuera para hacer entender que el futuro de la televisión pasa por otro tipo de mediciones, contenidos y estrategias. "Esta empresa es muy compleja. Es una labor de dentro y de fuera. RTVE tiene una imagen más tradicional y la gente tiene que captar que también somos RTVE, más distinta, con otro lenguaje".

"Y a nivel interno también nos exige una cierta dificultad para un conocimiento de lo que hacemos. Tenemos formas de trabajar, formatos, lenguajes, que no están adaptados o no son similares a los canales lineales convencionales", añade.

¿Cuál es por tanto la estrategia a seguir para que no se conozca más vuestra labor?

Hay distintas vertientes. En el mundo de Playz hemos iniciado una campaña de reposicionamiento de la marca. Ha habido productos reconocidos con premios y audiencia, pero la verdad es que no se conoce bien. Hemos lanzado una nueva campaña con Playground para relanzar la marca. Somos conscientes de que hay una carencia y estamos trabajando en ese sentido. 

Hay jóvenes que se identifican con OT o con los chicos, pero la lucha es que ese público joven se familiarice con el mundo RTVE

En el caso de los productos puramente televisivos con su parte digital, nuestra principal lucha es que la marca RTVE como concepto esté presente. Lo que vemos en los productos digitales es que la intermediación del canal se difumina cada vez más y la gente consume una serie concreta, un programa concreto... El canal de YouTube de Operación Triunfo es positivo para atraer al público joven a RTVE, pero el problema es que RTVE no tiene presencia. Hay jóvenes que se identifican con OT o con los chicos, pero la lucha es que ese público joven se familiarice con el mundo RTVE. 

Son dos luchas: que RTVE se identifique con los valores de OT y que haya más productos tipo OT en la parrilla. Si tenemos un público joven de 13 a 24 que tiene seguimiento de OT, pero luego no lo complementas con otra oferta que sea reincidente, es complicado que ese público se quede. Una mayor sinergia de OT con Playz sería positivo. 

Fotograma de 'Drama' (Playz)

¿Cómo hacer entender a los medios y a la población que OT ya no es un programa sólo en lineal?

Es que Operación Triunfo fundamentalmente es la Academia. Lo estamos viendo en los datos. En RTVE ha habido una caída en las galas, pero hay mayor interés en las noticias relacionadas con el día a día. Hay un público muy fiel de OT que está muy enganchado al 24 horas y ese es el foco. Los vídeos de reparto de temas tienen más audiencia que la mayor parte de las actuaciones de la gala. Es un caso extraordinario. 

Pero luego tenemos el canal de MasterChef, que ha superado los 400.000 suscriptores y que tiene grandes picos. Hay una gran línea de negocio y RTVE tiene que estar ahí no solo como elemento comercial, sino dirigiendo esos contenidos. La producción ejecutiva de un producto de TVE también tiene que ser 360. Desde tele hay que asumirse que lo digital no es un complemento, sino que forma parte del ADN. Y si esa parte digital no tiene una asistencia fuerte, se te cae con todo el equipo.

TVE siempre ha abierto puertas y así debería ser ahora de cara al futuro sobre todo teniendo en cuenta que esos otros espectadores consumen de otra manera… 

Sí, ahí está el dato de la audiencia en diferido, la audiencia digital de la web y la audiencia social. Esos tres datos deberían incorporarse de una manera mucho más estructural a la valoración de los programas porque te da una visión mucho más global de lo que estamos viendo.

La audiencia en diferido, la digital y la social deberían incorporarse a la valoración de los programas

Y ahí es donde ves realmente el impacto de un programa como OT, toda la audiencia que acumula... También son interesantes las audiencias de determinadas series, que a lo mejor no funcionan bien en abierto, pero sí en diferido. Si no se incorporan esos criterios es muy difícil que tengamos un juicio más equilibrado.

¿Cuál es el objetivo con Playz?

El objetivo es muy amplio. Por una parte hay que atraer el público joven que no ve TVE, que casi son de 45 años para abajo. Hay una audiencia que se va de Clan y ya no crece con TVE. Se está rompiendo el vínculo emocional entre la radiotelevisión pública y los ciudadanos, y eso es un problema muy importante de cara a la supervivencia de la empresa porque, aunque a corto plazo sigas pensando en que tienes un share y que la gente te está viendo, el envejecimiento progresivo de la población hace que tú como empresa vas perdiendo sentido. Nuestra labor es intentar incorporar esa gente a RTVE, pero teniendo en cuenta que ya no puede se les puede incorporar a ver un canal de televisión lineal o ni tan siquiera el consumo de plataforma digital. 

Tienes que intentar que no te tomen como el Señor Burns con gorra

Nosotros nos hemos dado cuenta que en un mundo tan competitivo de plataformas, es complicado que nos hagan caso. Por eso hemos optado por convertirlo en una marca de contenido, que haya un sello que un público joven se identifique con lo que hacemos porque le hablamos de sus problemas. Es una labor muy compleja porque exige estar muy pendiente de lo que está pasando y convertirlo en lo que debe ser un servicio público y reflejar los problemas reales de los jóvenes con su lenguaje. Y es difícil porque tienes que intentar que no te tomen como el Señor Burns con gorra.

Pero, una vez pasas esa frontera, es bastante satisfactorio. Queremos aprender de la gente que está haciendo cosas en digital que ha quedado fuera de RTVE y que queremos incorporar dando un apoyo presupuestario o de visión. 

Fotograma de 'Colegas' (Playz)

Pero para ello la plantilla de Playz también debe ser más joven...

Yo entré por oposición en 2007 con 26 años. Y desde entonces no ha habido contratados fijos. Es complicado encontrarse a alguien menor de 30 años. ¿Y eso qué significa? Que necesitas gente joven que esté consumiendo lo que tú estás haciendo. Por eso la mayor parte de la gente que tenemos aquí son gente en prácticas o que está cubriendo bajas. Si no tuviéramos gente con 23 años que está utilizando el TikTok y están haciendo el TikTok de Eurovisión, nosotros no hubiéramos sabido hacerlo igual.

La gente considera que un producto de RTVE se ve en la tele y, si no se ve en la tele, es un producto de segunda clase

Entiendo que Playz tiene su propio presupuesto… 

Hay un presupuesto de compras audiovisuales. Antes no había un presupuesto para proyectos digitales y éste se generó en 2017. Es relativamente pequeño a todo lo demás, que nos ha permitido hacer series de mayor presupuesto que Flooxer, pero que nos impide hacer proyectos que compitan con Netflix o Amazon. Yo me hubiera planteado hacer un spin off de una serie como van a hacer con El Internado, pero en la vida podremos hacer eso.

Muchas series de Netflix, Movistar o Amazon tienen más repercusión simplemente por el nombre de la plataforma y no por su calidad… 

Totalmente. Y eso es un problema. Drama podría competir con series de soft comedia de Movistar. Pero es verdad que no se le da ese relieve a esa producción porque no es lineal y además es de RTVE. El problema de base es que los productos digitales siguen sin estar vinculados a la marca RTVE. La gente considera que un producto de RTVE se ve en la tele y, si no se ve en la tele, es un producto de segunda clase. Muchas veces nos dicen que Drama debería emitirse en La 2. Pero no están pensadas para eso. Y entiendo a los programadores porque no está en el target. 

También se puede hacer el estreno en lineal a modo promocional… 

Como estrategia de promoción me parece bien porque La 1 es un gran altavoz. BocaNorte se emitió en La 2 y encantado de que fuera así. Pero no forma parte de nuestro esquema. Y más ahora que estamos remodelando nuestro servicio de RTVE a la carta en el que también se va a incorporar una oferta propia de contenidos digitales como tiene Atresplayer o Mitele que no va a ser necesariamente para jóvenes como Playz. 

RTVE a la carta va a incorporar una oferta propia de contenidos digitales como tiene Atresplayer o Mitele

Si no nos dedicamos a producir contenido como RTVE más allá del lineal o franjas horarias, estamos perdidos sobre todo por como va el consumo. La manera en la que concebimos los productos desde Playz en distribución 360 es un germen de cómo deberá empezar a producirse cosas en RTVE la próxima década. No podemos seguir pensando en la misma distribución de contenido. 

El gran secuestro os ha puesto en el mapa...

Sí, la verdad es que sí. Es un producto que demuestra que las fronteras de la televisión se están diluyendo. Manuel Bartual se asocia con una productora tradicional como Shine, conrostros del lineal como Máxim Huerta y hacen un producto que es híbrido, que no es lineal, que es un 24 horas, que es interactivo... 

¿Tenéis un objetivo de cuantas series hacer al año? ¿Cómo se gestan?

El funcionamiento ha ido cambiando. Al principio, por una parte éramos como otra ventanilla de la tele para las productoras tradicionales, y por otra estaban las agencias de influencers y talentos. Pero a las dos les faltaba una cosa: a una la producción televisiva de calidad y la otra una visión digital de su contenido. Y eso ha ido cambiando porque ahora vamos a buscar el producto concreto. Sabemos lo que está en el mercado y sabemos lo que queremos hacer. Al haber esta burbuja de producción de ficción tenemos que buscar iniciativas originales, más arriesgadas... A veces nos cuesta más, pero estamos entre tres y cuatro series al año.

Parte del equipo de 'El Gran Secuestro' (Playz)