La pasada semana Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition ya avanzaba que Carmen Lomana y Míriam Saavedra serían enemigas íntimas durante el concurso. Y esta semana, en la que Lomana ejercía de anfitriona, Míriam se despachó al afirmar que se había sentido mejor atendido por el servicio de Carmen que por la Lomana en sí, y por ello, le dio un cero a su cena.

Cierto es que la exconcursante de MasterChef Celebrity no se levantaba para traer los platos a sus invitados, sino que lo hacían sus trabajadores domésticos, y este detalle tampoco gustó a Canales Rivera, que le dio un seis y dijo que si la anfitriona se hubiese volcado más le habría dado más puntos.

Una vez se emitió la parte de las votaciones, Carmen acudió a Twitter a decir que “Miriam después de pasárselo “pipa” en mi casa de comer como si no hubiese un mañana y repetir de todo me ha dado 0 puntos. Esa es Miriam, sin comentario. Las personas se definen solas”.

Por su parte, la Saavedra aprovechó las redes para señalar cómo Carmen se había equivocado al pensar que una valoración (“hay personas con clase y clases de personas) había salido de Canales y no de ella. “Vaya se equivocó… Era mi frase.. y pensó que era de Canales. Las apariencias engañan. Nadie puede humillarte ni infravalorarte , resentidos y acomplejada aquellos que son incapaces de regenerar sus mil defectos cubiertos por la apariencia”.

Los momentos célebres de la cena

Como anfitriona, Carmen sorprendió al definirse vegetariana de una manera muy peculiar mientras preparaba pollo al curry: “Solo de mamíferos, ternera y eso. De aves no”, explicaba. En la cena, Pocholo Martínez Bordiú (que le dio un 10)  tiró los tejos a Lomana aplaudiendo su casa, su comida y para la propia Carmen, que recibió con buen agrado los cumplidos. “Con Pocholo hasta yo puedo tener un niño” dijo. “Tendríamos una niña que sería un espectáculo”.

Por su parte, Míriam Saavedra protagonizó un divertido momento al manifestar su desconocimiento de la geografía española. Y es que al hablar de Badajoz, de donde era el mayordomo de Carmen, destacó que es el lugar “donde mejor hablan español” y Carmen le corrigió, diciendo que quizá se refería a Valladolid. La cosa mejoró cuando Míriam dijo que Badajoz “tengo entendido que está al norte… Por ahí está Sevilla, ¿no?”.