Tras dos años en antena cumplidos el pasado mes de junio, Cámbiame es uno de los grandes estandartes de Telecinco. Un programa que originalmente tenía un pie en La Voz y otro en aquel Patito Feo de Antena 3 iba a ayudar a la gente a cambiar de estilo, y en cierta medida, de su forma de vida, pero que en realidad, ha resultado más ser una versión moderna de El Diario de Patricia al que la gente va por el mero hecho de contar su historia.

Y es que analizando su fondo y su forma se puede comprobar que Cámbiame no es más que un talk show, en la línea de El Diario o El programa de Ana,  al que la gente va a contar sus historias en cinco minutos de fama, y si consiguen llevarse un traje o unos zapatos nuevos, pues mejor. De moda aprendemos poco viéndolo, pero conocemos de primera mano numerosas salidas del armario, artistas que quieren promocionarse, pedidas de manos, peleas y personajes variopintos con ganas de un poco de reconocimiento.

La primera salida del armario

Uno de los primeros casos dignos de El Diario fue Simón, un seminarista de 20 años que acudió al programa para colgar el alzacuellos. Se trataba de un seminarista que quería empezar una nueva vida contándole a su familia que es gay, y tras el cambio, su familia le respondió con una carta en la que le decían que mientras sea buena persona no les importa su sexualidad.

Simón, tras el cambio

También hemos conocido de la mano de Cristina, Pelayo y Natalia la historia de Ana y Dani, dos hermanos por parte de padre que se conocieron a través de las redes sociales, y que quisieron usar la pasarela para contarle a todo el mundo que son pareja. Una historia que causó revuelo hasta el punto de que denunciaron al programa por “apología del incesto” ante la  Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, una demanda que no prosperó.

Cinco minutos de fama

Conocedores de que el programa puede permitir una gran promoción, tanto durante su emisión como por el ruido que genere en las redes sociales, muchos artistas se deciden a ir al programa para darse un poco más a conocer. Por Cámbiame han pasado Sylvia Pantoja, Yurena o Marlene Morreau, pero también otros músicos emergentes como Mar, la malagueña que participó en Got Talent y que quería que la convirtiesen de su look de arpista clásica a una más moderna.

Marimar en su paso por Cámbiame

"No hago las tareas de casa"

Si en vez de a Cámbiame hubiese ido a El Diario de Patricia, la Gaztañaga habría presentado así a Marimar. “Tiene 55 años, le gusta vestirse como una adolescente y vive con su madre, que se hace cargo de las tareas de la casa”. Pero como Marimar fue a Cámbiame, contó su historia en el probador, y además contó que es frígida y que nunca he tenido novio. Toda una historia personal cuando el objetivo del programa, al menos en teoría, es sencillamente que te pongan un nuevo traje, te tiñan el pelo y te maquillen.

 Un clásico de los talk shows fue el de las parejas de cibernovios que acudían a conocerse en persona, algo que se ha perdido. Pero el amor en general sí que está presente en el programa, que entre nuevas camisas y peinados ha acogido incluso pedidas de manos, la última de ellas hace menos de una semana.

La pitonisa que auguró mal bajío

Y como en buen talk show, en Cámbiame no pueden faltar personajes estrambóticos o divertidos, de esos a los que les gusta salir de vez en cuando en la tele con cualquier excusa. Desde una pitonisa que auguró “mal bajío” al programa si no la elegían hasta Platania de First Dates, quien ha acudido varias veces ya al programa bien sea para recibir ella misma el cambio o bien para acompañar a alguno de sus colegas para que le hagan una nueva imagen.