Tras el apoyo del público el pasado jueves, Suso comienza a sentirse uno de los hombres fuertes dentro de la casa de Gran Hermano y pretende decir adiós a los "aburridos" de la edición. Cree que los espectadores quieren guerra dentro de la casa y por eso le han dejado dentro.

Por eso el motero ya ha comenzado a planear cómo van a ser sus nominaciones de cara al próximo jueves. El concursante mantuvo una conversación con Amanda, su amiga del alma dentro del programa, este lunes por la noche en la que señaló a Niedziela y Marina como sus próximos objetivos.

Suso tiene a la rubia entre ceja y ceja desde hace semanas. El concursante considera que Marina es un mueble dentro de la casa y se irá del programa en cuanto salga nominada. "Es muy aburrida", insistió en su conversación con Amanda.

Mientras tanto, su acercamiento a Sofía sigue ocasionando muchos recelos. Después de amargarle la existencia en el programa por su relación con Raquel, Suso parece haber encontrado de nuevo un apoyo en la hija de Maite. De esta forma, la ex pareja y Amanda estuvieron robando comida de la nevera este lunes por la noche y comiéndosela en el confesionario en clave de nueva alianza.