Drag Race España coronará esta tarde a su primera ganadora. Carmen Farala, Killer Queen y Sagittaria lucharán una vez más para demostrar que son la mejor drag queen de nuestro país y pondrán el broche de oro a una edición que se ha ganado el aplauso internacional.

Así, se puede ver en la IMDB que la temporada es la mejor valorada de todas las que se han desarrollado fuera de Estados Unidos, lo cual es todo un halago teniendo en cuenta que en Reino Unido u Oceanía contaban con la propia RuPaul como maestra de ceremonias.

A lo largo de los siete episodios emitidos (y el especial reencuentro), Drag Race España ha entrado con letras de oro en la ‘herstory’, esto es, la historia del formato. Y razones no faltan.

La presentadora, Supremme de Luxe, ha sido una maestra de ceremonias maravillosa, empática, divertida, picante. No podía haber sido una mejor elección. El jurado ha dado buenas valoraciones y se ha contado con la presencia de artistas de lo más interesante y variado, desde “la otra Alaska” (en Estados Unidos hay una drag llamada artísticamente igual que Olvido Gara) hasta Carlos Areces o Susi Caramelo.

Y luego están todos los momentazos que nos han dado las reinas participantes. Arantxa Castilla-La Mancha, Hugáceo Crujiente, Carmen Farala, Inti, Dovima Nurmi, Vulcano, Killer Queen, Pupi Poisson, Sagittaria y The Macarena han estado a la altura. Nos han dado moda, humor, arte, improvisación, vulnerabilidad. Mucho más del carisma, autenticidad, carácter y talento que se pide para alcanzar la corona.

Por ello, a continuación analizaremos 9 puntos por los que Drag Race España pasará a los anales de la ‘herstory’.

Inti, en el segundo episodio de 'Drag Race España'

La revolución trans

El universo Drag Race ha sido siempre un canto a la diversidad. En el primer episodio, Inti quiso preguntar por la “revolución trans”, ya que se identifica como persona trans no binaria. En ese momento se sorprendió al descubrir que otras compañeras como Hugáceo Crujiente, Arantxa-Castilla-La Mancha y The Macarena se identifican en el espectro no binario, es decir, que no se perciben como personas masculinas ni femeninas por completo.

Más tarde, las propias reinas explicaron, bien en el programa, bien a través de las redes sociales, cómo han tenido problemas para aceptar su imagen o su cuerpo. “A veces, no me veo en el espejo y es muy raro. Es una disforia constante. Me da mucha disforia tener estos dos pechos y estar en esta situación”, explicó Inti en ese sentido, invitando a que se mire mucho en el espejo a quien esté en su misma situación. “Y que no intente buscar nada malo, porque para ser trans no necesitas hormonas ni ningún papel de un psiquiatra que te diga que eres una persona trans, no necesitas nada”, apuntó.

En ese mismo sentido, Arantxa explicó en Twitter que incluso en la actualidad sigue “teniendo pensamientos intrusivos en cuanto a mi identidad de género y mi cuerpo”, pero que gracias al programa ha logrado pequeñas metas como ser leída en femenino por su familia.

La salida de The Macarena

El humor es muy necesario en un formato como Drag Race. En la versión de España, The Macarena suponía una nota de color y de gracia andaluza, aunque no pudimos seguirla mucho, pues tuvo debut y despedida en la misma entrega.

Si en Estados Unidos hay despedidas icónicas como “Miss Vanjie, Miss Vanjie, Miss Vanjie”, The Macarena fue un poquito más ordinaria. Con mucho salero, se quejó de haberse cosido todos los trajes para el concurso. “¡No me cago porque estoy en la tele!”, espetó al salir.

El abandono de Inti

En el tercer episodio, Mocatrices, la pasarela consistió en la categoría “Mis raíces”. Cuando se juzgó a Inti, Ana Locking le dijo que había cosas en su traje que podría haber mejorado, y esto no sentó nada bien a la participante. Inti no entendía la crítica, y su enfado se agravó al entender que estaría en la cuerda floja y que se jugaría la eliminación.

Al entrar al taller antes de escuchar la valoración definitiva, en un giro de acontecimientos nunca visto, se quitó su drag, se desmaquilló y se vistió de calle, dispuesta a abandonar. Supremme de Luxe tuvo que entrar para calmarla y que no tirase la toalla, pero no sirvió de nada. La drag estaba triste porque cree que el jurado no entiende su arte y está cansada, a pesar de que solo llevamos tres programas. Aquella noche, Dovima hizo el lipsyc ella sola… y lógicamente se salvó.

El lipsync de Sagittaria contra Dovima

¿Por qué Inti abandonó de forma dramática? Es uno de los enigmas de la temporada. Sobre todo, porque si quería salir podría haberse rendido. Podría haber hecho un lipsync flojito, como el de Charlie Hides contra Trinity Taylor, o un despropósito divertido como el de Tammy Brown en la primera temporada.

O haber hecho como Dovina Nurmi, cuando tuvo que enfrentarse a Sagittaria tras desfilar en La noche de las mil Rosalías. Cuando empezó Drag Race España parecían enemigas íntimas, como Coco Montrese y Alyssa Edwards y esperábamos verlas machacarse mutuamente en una sincronización de labios.

Sin embargo, a la hora de la verdad, Dovima decidió no competir, regalando a Sagittaria su continuidad en el programa. Optó por el mutismo absoluto, quieta, sin bailar ni mover los labios. Algo que jamás había sucedido tampoco en ninguna de las ediciones extranjeras del concurso, y eso que hay más de 20 temporadas.

Carmen Farala y Carla Farala

Los trajes que ha confeccionado Carmen Farala

Las pasarelas de Carmen Farala han sido algo tremendo. No hay día que no haya lucido como un pincel, conocedora de su cuerpo y de su estilo. El mérito es mayor si sabemos que ella misma confecciona sus modelos.

En el primer programa le vimos hacerse un maravilloso pantalón y chaqueta con fundas de colchón y bolsas de rafia. El día de Rosalía, en un gesto de generosidad, se cosió a toda prisa un nuevo traje en el taller para no repetir modelo con Dovima, a la que incluso prestó complementos. Y cuando tuvo que convertir a un jugador de rugby en su familia drag confeccionó de la nada dos modelazos inspirados en Sherlock Holmes y Watson que llevaron su sello personal. Su moda está a la altura de Raja o de Violet Chachki, sin duda.

Sin olvidarnos de la pasarela de 'Arte español'. Y es que cuando parecía que todo estaba visto en lo que se refiere a ruveals (trajes que llevan una sorpresa), Carmen comenzó a soltar pintura en su falda, para terminar la obra de arte de Miró en directo.

‘Drag Race España’ y su tributo a La Veneno

La pasarela de ‘La Veneno’

En el segundo episodio, Drag Race España homenajeó a Cristina Ortiz, La Veneno, quien está siendo conocida “a nivel mundial” (que diría la propia Cristina) gracias a la serie que de ella han hecho Los Javis.

Así, en aquella pasarela nos enseñaron diferentes etapas de Cristina. Pero lo más importante fue que la historia de Cristina, con sus luces y sus sombras, ha vuelto a contarse una vez más y que espectadores de todos los países se han interesado por aquella prostituta andaluza que una noche cruzó el Mississippi.

El Snatch Game de ‘Drag Race España’

Encarnita del Baptisterio en el ‘Snatch Game’

Una de las pruebas más emblemáticas de Drag Race es el juego de las imitaciones o Snatch Game. En ella, las reinas tienen que imitar a una celebridad de cualquier tipo, y responder con gracia, acorde a su personaje, a diferentes preguntas que hace el presentador.

Killer Queen decidió meterse en la piel de una excesiva Isabel Díaz Ayuso con mucha gracia. Carmen Farala fue Dakota con bastante buen desempeño, y Pupi Poison brilló como Karina.

Pero quien de verdad dio la nota aquella noche fue Sagittaria metida en la piel de Encarnita, una de las herederas del baptisterio de Las Gavias, cuya historia conocimos en Crónicas Marcianas y Callejeros.

Sagittaria se puso los dientes negros, hizo cánticos religiosos, pedía que la enfocasen. Una imitación descacharrante. Moriría por saber cómo se tomaron fuera de nuestras fronteras esta imitación, aunque sin duda la drag catala logró que la esencia de su personaje se conociese.

Cuando Killer Queen nos recordó que en drag es política

Decíamos hace un momento que en el Snatch Game Killer Queen imitó a Díaz Ayuso. En su participación no paraba de hacer todo tipo de tics, habló de cómo copia a Trump, cómo quiere que reine el caos o que “el problema de las drag queens son sus cabezas liberales”.

Algunos espectadores no entendieron que Killer optase por una imitación política, considerando que el drag y la política deben permanecer separados.

Sin embargo, Killer Queen transmitió de nuevo la idea de que más allá del espectáculo el drag es también un arma política. Como ya explicamos en estas páginas, el drag, como arte, rompe con las codificaciones sociales, ayuda a expresar el género de maneras diferentes, y durante su espectáculo, crean un espacio seguro para todo aquel que se salga de lo cisheteronormativo. Y es que las drag queens han estado al frente de muchas marchas desde antes de Stonewall, han ayudado a un cambio social, y continúan al pie del cañón.

En primer lugar Pupi Poison, y en en sexto lugar, Neptuna

La historia de Pupi Poison y de Neptuna

Además de mostrar arte y humor, Drag Race siempre ha enseñado que la vida es más difícil para aquel que rompe con lo cisheteronormativo. Así, por ejemplo, Pupi Poison contó cómo en su casa su homosexualidad y su trabajo como drag es algo que se omite. “Siempre he tenido la sensación de 'lo tengo que ocultar'. Sabes que no va a ser bien recibido” se lamentaba, narrando cómo sus padres preferían no saber dónde iba o venía. Incluso confesó que esa actitud familiar le ha hecho avergonzarse de ser como es.

Esto sucedió en el episodio del make over, cuando las reinas convirtieron en drags a unos jugadores de rugby. Uno de esos deportistas, que fue bautizado como Neptuna una vez hecha una reina, aprovechó su presencia en la pasarela para narrar testimonio escalofriante. Por su origen asiático sufrió una agresión racista cuando surgió la crisis del coronavirus, y terminó en el hospital con 22 puntos en la cabeza.

Entonces Supremme de Luxe dio un mensaje que tiene máxima vigencia ahora que en España se están denunciando tantas agresiones homófobas. “Es verdad que estamos en el siglo XXI, hay gente que dice que está todo muy superado y que estamos en una situación muy ideal. Y casos como el que te ha ocurrido a ti… Parece mentira que todavía tengamos que seguir luchando, siguiendo al pie, repitiendo. Y lo repetiremos todas las veces que haga falta y estaremos ahí en la lucha”, dijo la presentadora.

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