Las dos caras de una misma moneda

Estas semanas los temas de actualidad estrellas han sido la exhumación del Valle de los Caídos del tirano Franco y los ataques de la extrema derecha nacionalista a gente que retiran lazos.

El PSOE ha presentado un decreto ley donde urge a la exhumación del dictador, pero es un decreto ley que no cumple las formas básicas en el Estado de Derecho, ya que no existe un consenso amplio de todas las fuerzas ni la urgencia (no olvidemos que el PSOE ha tenido mayoría absoluta). Al no existir dicha urgencia, la familia del tirano amenaza con denunciar al Estado. Si ganasen esta demanda al Estado, se le daría artillería a los enemigos de la libertad para atacar a la legitimidad democrática.

Desde Ciudadanos se ha expresado que se votará abstención porque a pesar de estar de acuerdo con el fondo (en 2017 se votó a favor de una PNL similar), las formas no son apropiadas. Las formas serían un proyecto de ley integral para convertir el Valle en un cementerio nacional como el de Arlington, exhumar al dictador y que hubiera un consenso amplio sobre estas medidas. Las formas lo son todo en democracia y el propio tirano se saltó las formas cuando dio un golpe de estado contra la II República condenado a España a una cruenta Guerra Civil y a 40 años de dictadura.

Estas mismas formas se la saltaron por ejemplo, la extrema derecha nacionalista de Puigdemont y Quim Torra cuando aprobaron las leyes de desconexión y realizaron un #noreferedum, ya que no tenían competencia para realizarlo y prefirieron saltarse las formas.  Eso llevó a que sus líderes tuvieran que sufrir penas de prisión por una serie de delitos como prevaricación, malversación de fondos públicos, rebelión y sedición. Las formas lo son todo en democracia y si alguien intenta saltárselas, tendrá que sufrir el peso de la ley.  Y  después de entrar en prisión preventiva, estos líderes nacionalistas empezaron a poner lazos amarillos que empezaron a quitar otra gente. Ese intento de privatización ideológica de las vías públicas por los nacionalistas ha sido respondido por los no nacionalista con la retirada de esos lazos y, esos mismos nacionalistas, han empezado a agredir a los que intentan quitar esos símbolos secesionistas. Esas agresiones vulneran las formas democráticas y recurren a una cosa que está fuera de las formas democráticas de protesta: la violencia política. 

La falta de forma genera inestabilidad jurídica, política, falta de legitimidad y problemas de orden público. Señores demócratas, sean del partido que sean, apuesten por las formas y construyamos entre todos una democracia fuerte, consolidada y unida, porque si empezamos a saltarnos las formas, estamos poniendo en duda al propio sistema democrático, tanto de manera involuntaria como voluntariamente.