Zaragoza
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Pilar Guallart y su asociación Estelar han cumplido 10 años de esfuerzo, amor y bondad procurando ser ese rayito de luz y color en las UCI infantiles de los hospitales de Zaragoza. Su objetivo principal, después de haberlo vivido en primera persona, es hacer que todos los niños ingresados, desde los bebés prematuros hasta los de 14 años, se sientan un poco más en casa en esos momentos tan complicados. “Nosotros humanizamos las UCI”, resume la fundadora.

Los orígenes de la asociación Estelar son un ejemplo de sacar fuerza y positividad en una situación difícil. Pilar Guallart, presidenta de la entidad, cuenta cómo las vivencias de su hija le impulsaron a sacar adelante este proyecto: “Primero tuvo un bebé perfectamente sano, luego tuvo un aborto a la semana 19. Se volvió a quedar embarazada, lo llevaba mal psicológicamente, y le decían que al pasar la semana 19 se tranquilizaría. Pasó y se puso de parto en la 22. En la semana 24 dio a luz a Pablo y Ana, que pesaron 600 gramos. Ana falleció a los dos días”, recuerda.

Entonces, a su hija le entregaron de recuerdo el gorrito-venda que le pusieron a Ana en la cabeza al salir del quirófano. Esto se le quedó marcado a ambas y sería el inicio de lo que es hoy la asociación.

Por su parte, Pablo estuvo tres meses en neonatal desarrollándose dentro de la incubadora. Sobrevivió y ahora tiene 10 años, aunque con muchas secuelas. Pero, durante ese tiempo, Pilar Guallart estuvo en el pasillo del hospital tratando de ayudar. Decidió ponerse a tejer e hizo un gorro del tamaño de Ana.

Incubadora de transporte.

Cuando el pequeño consiguió salir del hospital, acudió a la supervisora de la planta para proponerle tejer gorritos del tamaño del bebé para dárselo a las madres que perdían a sus hijos.

Desde el hospital, la idea cuajó y le preguntaron si podía coser unas sábanas infantiles coloridas para las incubadoras. A partir de ahí, empezaron a ver otros detalles que se podían cambiar para lograr un entorno más agradable.

10 años después, su recorrido y trascendencia son increíbles. De la idea inicial de Pilar Guallart de tejer gorros infantiles de colores, Estelar ha ampliado horizontes y también proporciona a los centros sábanas, cortinas, carteles de ánimo o regalos en fechas especiales.

Donación de Estelar a bebés prematuros.

Estelar llega actualmente a todos los hospitales de Aragón, así como a algunos de Madrid o Pamplona. En estos atienden solo las UCI neonatales, mientras que en el Miguel Servet y el Clínico de Zaragoza hasta pediatría. “Nosotros humanizamos las UCI, desde la neonatal, que el bebé puede pesar medio kilo, hasta la pediátrica de 14 años, no hacemos diferencia de por qué está el niño ingresado. Da igual que sea de cáncer, de pulmón o de corazón. Es duro saber que tienes un hijo en una UCI, tratamos de que se vea de otra forma”, expone al respecto.