Valoración positiva del Gobierno de Aragón de la reunión entre todas las comunidades y el ministro Carlos Cuerpo para poner en común las medidas para evitar los efectos de la guerra comercial y los aranceles de Trump. La vicepresidenta, Mar Vaquero, ha pedido al Estado “medidas estructurales” que “refuercen la competitividad de las empresas” ante una situación que “no es puntual”, sino que evidencia los “riesgos” a los que está expuesta la economía.
Así, la también consejera de Economía ha reconocido que Estados Unidos no es un mercado que vaya a generar tensiones en las exportaciones aragonesas, ya que apenas suponen un 1,4% del total, pero advierte de los impactos de una “segunda ola” en Alemania, Francia o Italia. “Es necesario estar alerta”, ha subrayado Vaquero.
Por ello, desde el Gobierno de Aragón creen que esas “medidas estructurales” deben pasar por una “estrategia planificada” para reforzar la industria, que incluya actuaciones de carácter fiscal, simplificación administrativa o eficiencia energética, reforzando las inversiones en distribución y transporte eléctrico. “Eso nos haría reforzar la soberanía energética y que las empresas tuvieran mejores condiciones”, ha apuntado.
En este sentido, Vaquero ha pedido al ministro “lealtad institucional” con las comunidades, planteando el reparto de ayudas en “igualdad” y sin “intereses políticos” del Gobierno de España. “Queremos participar en la cogestión de las medidas económicas y las de medio y largo plazo. Somos las comunidades quienes conocemos el impacto real en la economía”, ha añadido.
Por otro lado, la vicepresidenta ha negado que esta guerra comercial ponga en riesgo las inversiones de alguna de las empresas norteamericanas que han apostado por Aragón, como Amazon Web Services, Microsoft o Blackstone. “Incluso en sectores más directamente afectados, como el agroalimentario o el vino, han mostrado calma, aunque sí la necesidad de adoptar medidas estructurales. Las inversiones que tenemos en Aragón siguen adelante”, ha remarcado.