Desde un coche, entre llamadas, paradas a repostar y peajes, Roi Méndez atiende a El ESPAÑOL de ARAGÓN con su voz cercana y una naturalidad que le caracteriza. El artista gallego atraviesa una etapa crucial de su carrera. Lejos de lo que fueron sus inicios en la industria musical tras su paso por Operación Triunfo en 2017, Roi se encuentra inmerso en una profunda transformación artística. Una transformación que no es solo musical, sino también personal.
“Estoy en un momento muy bonito”, confiesa. Se nota que lo dice con sinceridad. Este año ha estado volcado en la preparación de su nuevo proyecto, un álbum que verá la luz en 2025, y que no solo marcará un nuevo sonido, sino también una nueva manera de enfrentarse al escenario, al público y a sí mismo.
La gran novedad no está solo en el repertorio. Esta vez, Roi ha decidido dar un paso más allá: ha creado un alter ego, R01, una especie de "versión paralela de sí mismo" con la que firmará las nuevas canciones. En redes sociales y plataformas como Spotify, ha abierto cuentas separadas para este nuevo proyecto, dejando atrás (aunque no del todo) al Roi que el público conocía.
Algo "muy nuevo"
“R01 es visualmente representado por un muñeco”, explica. “Los temas son colaboraciones de Roi con R01. Es algo muy nuevo para mí”. Esta figura le permite experimentar con libertad, probar sonidos, colores y formas distintas sin perder su esencia. “Me da mucha libertad en el escenario”, dice, “puedo adoptar diferentes roles según la canción, mostrar otra versión de mí sin que choque”.
R01 aún está en construcción, pero la intención es clara: “Quiero que sea una persona divertida, sin prejuicios, que se deje la vida en cada concierto y que conecte con la gente sin juzgarse”, asegura.
Roi Méndez, cantante. E.E
Roi nunca ha escondido sus inseguridades. “La duda siempre está conmigo”, reconoce. De hecho, no le cuesta admitir que hubo momentos en los que pensó que este nuevo enfoque quizás no funcionaría, que era demasiado arriesgado. Pero después de siete años de carrera, siente que era el momento de cambiar. “Me apetecía arriesgar y cambiar un poco el método”.
Emociones sin filtros
Su música también habla de eso. De aceptar las dudas, de mostrar emociones sin filtros, de intentar proyectar una imagen más segura aunque por dentro haya temblores. El disco, que define como el más “ordenado” de su carrera a nivel sonoro, es una paleta coherente de sonidos que, según él, pertenece a un mismo universo. “Es un proyecto honesto”, dice, y reconoce entre risas que “no sabría venderlo mejor”.
A la espera de la gira oficial que llegará con el lanzamiento del álbum, Roi ha ideado una fórmula diferente y muy personal para presentar sus nuevas canciones: el House Tour. Conciertos acústicos, gratuitos, en casas particulares. Él canta, y quienes ganan el sorteo, le abren las puertas de su salón. Es una manera de rodar el disco, de estar en contacto con la música y con el público, y de probar el repertorio antes de que salga oficialmente.
"La mayoría de cosas que me han pasado han sido buenas, y de todas he aprendido”.
Roi Méndez, cantante
“La experiencia está siendo increíble”, confiesa. “Al principio me parecía extraño llegar a una casa que no conoces, con gente que no conoces. Pero mi cuerpo se adapta súper bien”. Las primeras fechas han sido un éxito. El público, incluso sin conocer las canciones, acaba cantando. “Es muy divertido”, dice entre risas.
En su primer concierto, Roi recuerda sus nervios. "Cuando llegue vi que había un par de chicos metaleros... estaba cagado. Pensé que mi rollo no les iba a gustar”, recuerda. Pero para su sorpresa, "acabaron disfrutando y gritando como locos", recuerda entre risas.
House Tour
Desde aquel 2017 en el que Roi saltó a la fama, han pasado muchas cosas. Él lo sabe. “He madurado un poco, no mucho”, dice con humildad. Lo que sí ha ganado es autoconocimiento. “Ahora me sé regular más. Pongo más conciencia a lo que siento”. También ha aprendido a no proyectar expectativas irreales, especialmente ahora que cada concierto del House Tour es una incógnita.
Si pudiera hablar con aquel Roi de hace siete años, el joven lo tiene claro: "Le diría que confíe en su intuición". “Siempre fui fluyendo con la vida”, afirma, y añade que, de hecho, "la mayoría de cosas que me han pasado han sido buenas, y de todas he aprendido”.
Roi Méndez, cantante. E.E
Por primera vez, Roi parece estar centrado en el ahora. “Siempre estoy con la cabeza en el futuro, proyectando”, dice. Pero este proyecto le está ayudando a enfocarse. No piensa en volver a lo de antes, ni en lo que vendrá después. Está aquí, con R01, con su disco a medio terminar, con sus conciertos en salones y con sus canciones que cuentan historias propias, aunque ya algo lejanas.
“No pretendo ayudar a nadie con estas canciones”, dice con honestidad. “Es más una forma de contarme cosas a mí mismo”, concreta. Y en ese ejercicio de sinceridad, quizá sin buscarlo, acaba ayudando a otros.
Este sábado estará en Zaragoza, en otra casa, con otro grupo de desconocidos que tal vez se convertirán en fans, o en cómplices, aunque sea solo por una noche. No sabe aún dónde comerá, ni cómo será la gente. Pero eso ya no le importa tanto. Aprendió a no esperar nada y a disfrutarlo todo.
Y así, canción a canción, salón a salón, Roi (o R01) sigue escribiendo la versión más auténtica de sí mismo.