Zaragoza
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La nueva "turbo rotonda" de Arcosur ya está abierta al tráfico desde esta mañana. Esta será un nuevo eje estratégico de conexión entre el sur de Zaragoza, la carretera N-II y el área logística de PLAZA. Se trata de una de las infraestructuras de este tipo más grandes del país, con un diámetro de 110 metros, y diseñada específicamente para mejorar la fluidez y seguridad en uno de los accesos con mayor potencial de crecimiento de la capital aragonesa.

La obra ha sido ejecutada por la Junta de Compensación de Arcosur bajo supervisión municipal, y su diseño responde a criterios de eficiencia y modernización vial. Gracias a su geometría guiada, los vehículos deberán elegir su carril antes de acceder a la glorieta, en función de su destino, evitando así los cambios de carril en el interior y los cruces de trayectoria.

Tres carriles canalizados

La glorieta cuenta con tres carriles interiores segregados y está dimensionada para soportar un volumen estimado de entre 15.000 y 18.000 vehículos diarios. Esta capacidad será clave para canalizar tanto el tráfico residencial de Arcosur –uno de los barrios con mayor proyección de Zaragoza– como el tráfico de paso hacia la N-II y PLAZA.

Ejemplos de estas rotondas. Ayuntamiento de Zaragoza Zaragoza

"Con esta rotonda no solo mejoramos los accesos y la seguridad de una zona en desarrollo, sino que evitamos contaminación, facilitamos la movilidad de vehículos pesados y anticipamos el crecimiento urbano. Es una infraestructura pensada no para la foto fija actual, sino para cómo será Zaragoza dentro de unos años”, ha apuntado la concejala de Movilidad, Tatiana Gaudes.

A diferencia de las rotondas convencionales, las "turbo rotondas" canalizan el tráfico desde el acceso, lo que mejora la eficiencia del flujo vehicular y reduce en hasta un 75% la siniestralidad. Además, se estima que esta tipología mejora la capacidad de la intersección en un 30% gracias a la eliminación de puntos de conflicto.

Ventajas clave de la infraestructura:

  • Seguridad mejorada: Menos puntos de cruce y trayectorias definidas reducen la posibilidad de accidentes.

  • Fluidez del tráfico: Se minimizan las retenciones y se agiliza el tránsito, especialmente en horas punta.

  • Reducción de emisiones: Menos frenazos y aceleraciones conllevan una disminución de la contaminación y el consumo de combustible.

  • Diseño adaptado al tráfico pesado: La glorieta está preparada para soportar el paso fluido de autobuses y vehículos de gran tonelaje sin interferencias.

Señalización específica

Los accesos a la rotonda cuentan con señalización específica que informa a los conductores del carril que deben tomar en función de su destino. Una vez elegido el carril correcto en el acceso, la señalización horizontal guía a los vehículos hasta la salida correspondiente, garantizando un flujo continuo y seguro.

La elección de sus dimensiones responde a la necesidad de ofrecer una solución de gran capacidad en un punto neurálgico del desarrollo urbano de Zaragoza. Esta glorieta no solo mejora la conexión entre Arcosur y la red viaria metropolitana, sino que también anticipa el crecimiento poblacional y el aumento del tráfico previsto en los próximos años.