El último adiós a Javier Lambán será en su querida Ejea de los Caballeros, su ciudad natal. Él mismo dejó dicho en vida que no quería nada especial, aunque sí habrá un acto civil que se prevé multitudinario.
La familia ha expresado su deseo de que no haya capilla ardiente. Así, recibirá en el tanatorio de Ejea a quienes quieran despedirse de él a partir de las 18.30 de este viernes. También mañana sábado de 10.00 a 13.00.
A esa hora comenzará un acto civil en la sala del crematorio al que se espera que asistan compañeros de la política, empresarios y representantes del tejido social y la cultura de la Comunidad.
Tras ese acto se procederá a su incineración, que se hará "en la intimidad familiar".
Lambán, han destacado desde el PSOE, dedicó toda su vida al servicio público desde el Partido Socialista.
Su carrera política la inició en 1983 como concejal de Ejea. Ocupó la alcaldía (2007-2014) y la presidencia de la Diputación Provincial de Zaragoza (1999-2011) y estuvo al frente de la oposición en las Cortes de Aragón antes de convertirse en presidente (2015-2023), responsabilidades que compatibilizó con el liderazgo provincial y autonómico del PSOE.
La recuperación de los servicios públicos, la pandemia de la covid-19 y el desarrollo económico y social de Aragón fueron claves durante su mandato.
Para su sucesora al frente del PSOE-Aragón, la ministra y portavoz Pilar Alegría, es difícil concretar su legado en pocas palabras. "Pero su amor por Aragón y su trabajo incesante por mejorar la vida de todos los aragoneses y aragonesas fue siempre su prioridad”, ha subrayado.
Por su parte, el Gobierno de Jorge Azcón ha emitido un comunicado oficial en el que expresa su "reconocimiento y gratitud por su noble dedicación al servicio de los aragoneses".
"Su recuerdo nos congrega para testimoniar nuestro pésame, nuestra compañía y nuestra solidaridad con su familia y con sus amigos. El presidente Lambán ejerció con abnegada dedicación la más alta
responsabilidad pública y, al tiempo, el máximo honor al que puede acceder un aragonés. Su honradez, entrega y honestidad en el ejercicio de sus obligaciones como Presidente de todos nosotros merece el respeto y el aprecio de las gentes de bien", dice
Para el dirigente popular, su legado "lleva el sello de su defensa inquebrantable, valiente y tenaz del bien general de los intereses de Aragón por encima de cualquier otra consideración; y de su amor inquebrantable a España". "No rebló ante la injusticia, mantuvo su palabra y entregó con largueza, hasta su último día, su esfuerzo por mejorar nuestra tierra para las siguientes generaciones. Fue ciudadano ejemplar y fiel y leal servidor de Aragón", subraya.
